Josefina Martínez/
El Diario
Los pasantes del área de Salud Pública que egresen de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez contarán con un protocolo de medidas cautelares que garanticen su seguridad durante la prestación de su servicio social, esto se informó ayer como parte de los acuerdos para que el médico Antonio Muñoz levantara la huelga de hambre que sostenía desde el jueves pasado en las puertas de Rectoría.
El documento se elaborará de manera interdisciplinaria por abogados, académicos, estudiantes, y personal de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, y aunque no se tiene fecha para su presentación, los trabajos iniciarán en breve, señaló el visitador de la CEDH, Carlos Gutiérrez.
Se informó que este acuerdo se logró en una reunión de trabajo que concluyó el lunes por la noche en la que participaron el rector de la UACJ, Ricardo Duarte Jáquez; el director del Instituto de Ciencias Biomédicas, Daniel Constandse Cortez; el coordinador de Comunicación Social, Raúl Flores Simental; el visitador de la Comisión de los Derechos Humanos, Carlos Gutiérrez Casas; el pasante de medicina Antonio Muñoz Quintana, Emanuel Albarrán Quiñones y Graciela Delgado Ramírez.
Actualmente hay alrededor de 180 pasantes que se encuentran realizando este servicio social en el estado, pero sólo hay 20 ó 30 de ellos que se encuentran en lugares apartados de las ciudades
En esta reunión también se acordó que la huelga de hambre y el plantón en la entrada principal a la Rectoría se levantaría luego de la rueda de prensa, lo cual ocurrió a las 10:30 de la mañana.
Antonio Muñoz se mostró satisfecho con los acuerdos y señaló que el principal logro es la creación de este protocolo de medidas cautelares que beneficiará a los egresados de medicina, veterinaria, odontología, nutrición y demás agentes de salud que egresen de la UACJ.
“Se hará la reubicación para que Antonio Muñoz Quintana pueda realizar su servicio social en un lugar donde se garantice su seguridad y lo lleve a cabo en apego a la reglamentación y con respeto a sus derechos laborales, por lo que será asignado a un lugar que se encuentra entre las ciudades de Camargo y Chihuahua”, dijo Manuel Loera, secretario académico de la UACJ.
Muñoz Quintana dijo que durante la madrugada había comido su primer alimento, luego del ayuno que sostuvo desde el jueves pasado.
Comentó que desde hace mucho tiempo existe la inquietud por parte de los estudiantes y sus familias por los lugares a donde son asignados para que realicen su servicio social y buscan que se les envíe a sitios más próximos a las ciudades.