El Diario
2015-05-22
Con un beso y la promesa de estar siempre a su lado, así se despidió doña Estela Landeros de su hijo Jaime García Landeros, probable responsable del asesinato de su ex pareja Diana Isela Valles Hernández, quien ayer se entregó de forma voluntaria ante el Ministerio Público.
Las fuerzas abandonaron a la mujer de 70 años cuando su hijo le dio el último abrazo y caminó con las manos a la espalda y la cabeza agachada hacia la Unidad Especializada en Investigación de Delitos contra la Vida.
En la sala de espera, decenas de ciudadanos que acudieron a interponer denuncias por diversos delitos observaron la inusual escena que se desarrolló frente a las oficinas del área de Comunicación Social, donde el Ministerio Público concedió unos minutos a madre e hijo para reencontrarse y despedirse.
Las hermanas de Jaime García Landeros dijeron que la petición de la madre hizo eco en la conciencia de su hijo, quien después de 24 horas del crimen que aceptó cometer, acudió ante un medio de comunicación para entregarse, posteriormente los agentes de la Fiscalía General del Estado lo aprehendieron.
Desde las 12 del día doña Estela Landeros esperaba a su hijo en la explanada de la Fiscalía. Horas antes habló con una de sus hermanas que le dio el mensaje a Jaime: “mi mamá te pide que te entregues, que no huyas” y él le respondió que sí.
La madre, de piel morena, estatura baja y cabello blanco, dijo que único que quería era pedir a las autoridades que le brindaran seguridad a su hijo, principalmente en el Cereso, pues afirmó que el hermano de la víctima lo había amenazado de muerte.
La víctima Diana Isela Valles Hernández y Jaime sostuvieron una violenta relación sentimental. Cuando se conocieron ella tenía a su hija Diana, entonces de 5 años, y luego juntos procrearon otra hija. Pero cometieron muchos errores, dijo doña Estela.
Las vecinas de la mujer victimada afirmaron que Jaime la hostigaba, que le había dado mala vida y la golpeaba, incluso frente a su hija.
En las pocas palabras que alcanzó a pronunciar el supuesto agresor, dijo que intentó arreglar las cosas con su “esposa” pero la situación se salió de control.
Diana, de 38 años y madre de dos hijas, murió por shock hipovolémico consecutivo a heridas producidas por arma de fuego.
Su cuerpo quedó sin vida en el interior de una camioneta Astro, estacionada afuera de su casa ubicada en las calles Pedro Herrera y Francisco Escárcega, de la colonia Juanita Luna Arrieta, conocida como Estrella del Poniente.
El arma de fuego empleada por el agresor fue una pistola tipo revólver calibre .38 Súper, que fue asegurada en el interior del camión de transporte de personal con el número 6986 y que abandonó en la calle Sinaloa, de la colonia Fronteriza Alta.
“Ellos tenían muchos problemas, ya no vivían juntos, no sé qué fue lo que pasó, me enteré de lo que pasó por las noticias y ahí yo me desmayé del susto. No he visto a mi nieta y sé que está con la mamá de esta muchacha, todo esto que pasó es muy triste, no debió haber pasado”, lamentó doña Estela.
“Estas son las consecuencias de una mala relación”, dijo la abuela que ahora teme perder a su nieta.
Ayer la familia de Diana Isela veló su cuerpo. Las dos hijas de la víctima han permanecido juntas, aunque se desconoce quién asumirá la guardia y custodia de la menor de ellas.
En sólo cinco meses, cuatro mujeres han sido asesinadas por sus parejas o ex parejas sentimentales. En la mayoría de los casos fue con armas de fuego, según el archivo periodístico.
En este caso motivo del crimen fueron los celos. “Yo quería arreglar las cosas bien, pero no se pudo”, alcanzó a decir el acusado, a quien se le permitió despedirse de su madre y sus hermanas.
Investigan posible negligencia
La Fiscalía Especializada en Atención a Mujeres Víctimas del Delito de Género (FEM) informó que Diana Isela Valles Hernández presentó una denuncia ante el Ministerio Público en contra de Jaime García Landeros desde septiembre de 2014.
Ella contaba con medidas de protección, porque así lo dispuso el Ministerio Público, para que en caso de que él la molestara llamara al 066 y fuera detenido por los agentes, dijo Manuel Torres, vocero de la FEM.
Señaló que se tiene un registro de dos llamadas realizadas por la víctima, pero en ambos casos los agentes no lograron ubicarlo a su ex pareja, por lo que no fue detenido.
“Ella en varias ocasiones llamó al 066 y lo hacía cada vez que lo veía, pero en esta ocasión no llamó”, justificó Manuel Torres, vocero de la Fiscalía de la Mujer.
“Ella recibía atención sicológica y orientación legal. El último día que estuvo aquí fue el día 7 de mayo, cuando habló con una trabajadora social”, agregó el portavoz.
Dijo que no existe un registro de que la denunciante estuviera un día antes de que la matara su ex esposo. Sin embargo, aseguró que se realiza una investigación interna para establecer si en este caso hubo una omisión de la autoridad investigadora y de ser así aplicar la sanción correspondiente.
El día del asesinato, una vecina recriminó a los policías municipales y estatales que acudieran sólo a levantar el cuerpo, cuando la víctima había acudido a la Fiscalía a pedir auxilio porque su ex marido la estaba amenazando de muerte. (Luz del Carmen Sosa/El Diario)
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