Josefina Martínez
El Diario
Por décima vez, la Secundaria 8305 “Salvador Allende” fue saqueada. Más de 50 computadoras fueron robadas ayer de la escuela localizada en el kilómetro 27 de la carretera a Casas Grandes, informó el personal docente.
“Estamos muy tristes y los estudiantes más porque apenas habían empezado a trabajar con las computadoras, a aprender sobre los programas y aprovecharlas para sus diferentes materias, ahora tendrán que suspender esta parte de su aprendizaje”, dijo el director José Luis Arellanes.
El salón de cómputo es el único construido de material sólido, y se ubica cerca de la entrada de la Secundaria 8305 “Salvador Allende”, que ha sido saqueada en diez ocasiones desde que fue fundada en el año 2000.
Ahí se guardaban los aparatos dentro de dos anaqueles protegidos con rejas y candados, en los cuales los ladrones abrieron boquetes para sacar el equipo.
“Venían preparados, tal vez es gente que sabía bien cómo estaban protegidas las computadoras y de qué manera sacarlas”, expresó el subdirector, Manuel López.
Denunció que desde que se fundó la escuela ha sido robada por lo menos 10 veces, pero en esta ocasión fue un golpe más duro que de costumbre.
En agosto pasado, los ladrones se llevaron las bombas de los aparatos de aire acondicionado, indicó.
Lo anterior sin que se haya localizado a los culpables o las autoridades hagan algo para evitarlo, fustigó.
Enclavada en la colonia Villa Esperanza, la escuela fue fundada en el año 2000 para atender a adolescentes que viven en colonias como la Gobernadores, Plaza de Acuña, Kilómetro 30, 28 y 33.
La secundaria, denominada “por cooperación”, en realidad subsiste de las donaciones que se obtienen de grupos cristianos y del boteo que realizan los estudiantes, puesto que es mínimo el apoyo de la Secretaría de Educación, Cultura y Deporte, dijo López.
“No pedimos cuotas a los alumnos, casi nadie puede pagar, todos tienen muchas necesidades, algunos bajan de los cerros para llegar aquí”, comentó.
Agregó que lo importante para ellos es que los estudiantes encuentren un espacio para ser atendidos y han buscado todos los medios para lograrlo.
“Cuando fundamos la escuela contábamos solo con tres aulas de madera. Gracias al apoyo de grupos cristianos ahorita tenemos más de diez funcionando para dar atención a 245 alumnos, sólo funcionamos en turno matutino”, señaló el docente.
Dijo que con trabajo lograron entrar al programa de Escuelas de Tiempo Completo y tenían horario extendido y comedor, pero hace dos años lo quitaron.
“Para pagar al conserje salimos a botear porque queremos que él tenga un salario seguro, los 10 maestros que trabajamos aquí no tenemos plaza ni sueldo”, aseguró López.
Como parte de los apoyos que reciben en el Programa Escuelas de Calidad lograron equipar el salón de cómputo con más de 50 laptops para que los estudiantes se capacitaran en diferentes materias, sin embargo éstas fueron robadas ayer.
Alejandro Juárez, prefecto del plantel, señaló que él egresó del plantel en el 2005 y regresó como voluntario para apoyar a los maestros.
“Yo trabajo en otro lugar y aquí vengo cuatro horas de voluntario para apoyar a los maestros, así es como se consigue tener personal ya que no hay con qué pagar intendentes, prefectos ni maestros”, señaló.
Agregó que aunque ve adelantos en la escuela, aún falta mucho por hacer y esto le corresponde a las autoridades escolares, quienes deberían dotar de mobiliario y equipo a la institución.
“Estamos ubicados en una zona de mucha necesidad, los padres de familia y alumnos hacen lo que pueden, colaboran con la limpieza y con apoyos mínimos, pero siempre hace falta una aportación mayor para funcionar”, dijo Juárez. (Josefina Martínez)