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Celebran cubanos en esta frontera

M. Coronado/J. Torres
El Diario

2014-12-17

“Quisiera estar en Cuba ahora mismo para poder celebrarlo”, expresó Heberto Bernal Puertas, un cubano radicado en Ciudad Juárez, tras enterarse sobre el cambio en las políticas entre Washington y La Habana.
El anuncio de la normalización de las relaciones bilaterales sorprendió ayer a originarios de la isla que viven en ambos lados de esta frontera, que ven una mejora económica inmediata para Cuba.
Heberto trabaja como subdirector de Actividad Deportiva en la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez (UACJ). A sus 71 años tiene toda su familia en Cuba, con excepción de su esposa, su hija de 35 años y una nieta de 4.
“Hemos sufrido muchos años, ahora estamos muy contentos”, dijo.
El nacido en La Habana agregó que las relaciones rotas con Estados Unidos han causado muchos problemas en Cuba.
Indicó que aunque los cubanos asentados en México no tienen problemas para entrar y salir de la isla caribeña, los que viven en Estados Unidos y están contra la política del Gobierno cubano sí enfrentan trabas.
Señaló que lo primero que se verá beneficiado es la economía de su país, porque aumentarán las remesas que los cubanos que radican en Estados Unidos pueden enviar a sus familiares.
Además, añadió, otros países sobre todo latinoamericanos que no podían tener ciertas relaciones comerciales con Cuba por condicionamientos de Estados Unidos, ahora sí van a poder hacerlo, y ello implica mejores condiciones para la gente de la isla.
Dijo que hay esperanza de que esto sea el inicio de más cambios, sobre todo en el rubro económico, donde el embargo se mantiene.

También en El Paso

“!Es una bendición que haya pasado esto... gracias a Dios!”, dijo Yoel Hernández, un cubano radicado desde hace diez meses en El Paso, Texas, luego del anuncio que hiciera ayer el presidente Obama.
“Toda la comunidad cubana está contentísima, tanto los que estamos aquí en los Estados Unidos como los que están allá”, dijo José, de profesión músico, quien salió hace ocho años de su país de origen y entró por la frontera El Paso-Ciudad Juárez tras permanecer siete años en México.
Explicó que él salió de Cuba en julio de 2006 con una visa y un contrato para trabajar en México como músico.
Durante ese tiempo, cuando aún gobernaba Fidel Castro, se decidió a ingresar a los Estados Unidos para garantizar su calidad de vida y la de su familia.
Casado y padre de un hijo, añadió que con la apertura al intercambio comercial mejorará la economía, habrá más fuentes de empleo y por ende las familias que hoy sufren del sistema tendrán muchas posibilidades de gozar de una vida mejor.
Manifestó que al llegar a este acuerdo se evitarán más muertes de connacionales que huyen de Cuba en su intento por llegar a este país en su travesía por mar abierto.
“No sabe cuántos cubanos han perdido la vida en sus viajes en balsas al intentar llegar a territorio norteamericano. Eso ya no pasará porque saldrán de su país como debe de ser, con pasaporte en mano”, dijo.
Para el periodista Julio Molinet, originario de Manzanillo, provincia de Granma –quien al igual que Yoel ingresó a este país por la misma ruta– el acuerdo representa un hecho histórico y un parteaguas en las relaciones bilaterales después de más de 50 años del bloqueo.
“Es como una revolución en la cual no se tuvo que ir a las armas como sucedió en la Unión  Soviética... aquí se hizo de una manera pacífica para resolver los conflictos. Nadie salió dañado, no se derramó sangre”, señaló.
Agregó que el que se vayan a abrir embajadas en ambos países es muestra de una buena voluntad para solucionar los problemas de una manera diplomática, decente, cordial y humana.
Sobre un posible derrumbe del sistema comunista dijo: “son muchas generaciones fieles a esa doctrina, pero no quito la posibilidad de que pudiera pasar, ahora es prematuro. Tendrían que moverse muchos factores internos dentro de la isla para que pudiera ocurrir”.
Las negociaciones iniciadas desde más de un año por altos funcionarios de ambos países y con el apoyo tanto del Gobierno canadiense y del papa Francisco rindieron fruto para beneficio de la comunidad cubana y mundial, externaron por su parte algunos paseños que vieron con agrado el anuncio.
Y es que en su pasada visita de Francisco a Cuba, residentes de El Paso recuerdan la célebre frase del pontífice: “Que Cuba se abra al mundo y que el mundo se abra a Cuba”.
“Quién iba a pensar que esas palabras se hicieran realidad en tan poco tiempo. Sus palabras fueron proféticas “, dijo Jessica Salas, residente del Este de la ciudad.
Ahora, con la nueva iniciativa presidencial, los miles de cubanos radicados en Estados Unidos, tendrán la oportunidad de regresar a su tierra en el futuro para visitar a sus familias sin ser sujetos a los castigos realizados durante el mandato de Fidel Castro. (M. Coronado/J. Torres/El Diario)

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