Josefina Martínez
El Diario
Una mujer de 74 años presentó hipotermia debido a que pasó la noche del lunes y madrugada del martes afuera del domicilio donde habitaba ubicado en el cruce de las calles Nogal y Acacias de la colonia Insurgentes.
Vecinos del lugar solicitaron apoyo de las autoridades luego de que se dieron cuenta de que la adulta mayor se encontraba tirada en la calle.
“Al principio los vecinos reportaron que una persona estaba fuera y parecía que había muerto a causa del frío, pero cuando llegaron elementos de Seguridad Pública se dieron cuenta que tenía signos vitales, por lo que llamaron a los paramédicos y lograron estabilizarla”, dijo el doctor Gustavo Martínez, director del Hospital de la Familia donde fue internada la mujer.
La paciente dijo llamarse Amada Luján, de 74 años y originaria de Alvarado, Veracruz.
Amada relató que vive con su hijo y que la noche del lunes discutió con su nuera quien la arrojó de la vivienda.
El doctor Martínez comentó que al momento de su ingreso Amada presentaba hipotermia pero se logró estabilizarla y su estado de salud ayer era reportado como bueno.
“Ha comido bien y es atendida por las enfermeras de turno, la mantendremos en observación pero está fuera de peligro”, dijo el médico.
En su cama de hospital Amada dijo sentirse bien pero manifestó preocupación, “no tengo con qué pagar esta cama, estoy a gusto porque aquí está calientito, pero no tengo con qué pagar”.
El director del hospital dijo que al mes se registra por lo menos un caso como el de Amada Luján.
“Dejan aquí no sólo a personas mayores, también se quedan niños y jóvenes por los que no llegan sus familiares, nosotros los atendemos porque hay una política de cero rechazo y a través del Departamento de Trabajo Social se hacen las investigaciones correspondientes.
“Ya si los familiares no quieren hacerse responsables, pues simplemente se les da de alta”, expresó.
Informó que en el caso de Amada Luján es obvio que a la familia no le interesa puesto que de acuerdo a sus declaraciones la desalojaron de su casa.
“Ella misma ha dicho que no quiere regresar a su casa, así que buscaremos algún albergue para ella en cuanto esté lista para ser dada de alta; lo más seguro es que pediremos el apoyo del padre Aristeo Baca, quien tiene un albergue para ancianos a un lado de la clínica Santa María”, dijo.
Apenas con un hilo de voz y con semblante triste Amada dijo extrañar su tierra de Alvarado, Veracruz.
“Me gustaría regresar allá, están otros de mis hijos pero hace mucho que no los veo y está muy lejos, no se qué hacer porque está muy lejos”, expresó.