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El Diario
Un Tribunal de Garantía dictó auto de no vinculación a proceso al empresario Sergio Ricardo Bermúdez Espinoza, debido a que la persona que lo denunció no está acreditada para interponer la querella a nombre de la empresa que supuestamente sufrió el detrimento en su patrimonio, la inmobiliaria Desarrollos Salo S. A. de C.V.
Ante el error procesal, el juez, Antonio Coss Araujo ni siquiera entró al estudio jurídico de fondo del hecho denunciado, una presunta administración fraudulenta.
Esto luego de que el abogado del acusado, Nahúm Nájera Castro, expuso que el denunciante Gerardo Adolfo Benavente Bermúdez no fue acreditado con un poder notarial para interponer la denuncia contra su representado y al respecto el Ministerio Público y el acusador coadyuvante no argumentaron nada.
El pasado 16 de octubre Bermúdez Espinoza fue acusado del delito de administración fraudulenta en perjuicio de la empresa inmobiliaria Desarrollos Salo S. A. de C.V., por un monto de 11 millones 365 mil pesos y aunque él es dueño del 40 por ciento de las acciones de la compañía.
La querella contra Sergio Bermúdez Espinoza fue presentada por su propio sobrino, Gerardo Adolfo Benavente Bermúdez –hermano del director de Desarrollo Económico, Juan Ubaldo Benavente Bermúdez- en representación de la inmobiliaria Desarrollos Salo S.A. de C.V. con sede en Ciudad Juárez, ubicada en la avenida Tomás Fernández del fraccionamiento Jardines Campestre y clasificada en la categoría de fideicomiso para el desarrollo de parques y zonas industriales.
En la audiencia pública celebrada el 16 de octubre, una agente del Ministerio Público señaló que del primero enero del 2009 y hasta el 30 de junio de 2012 Bermúdez se benefició económicamente y favoreció a las empresas de su propiedad: Industrias Zeber S.A. de C.V. y Real Consulting International Incorporation.
Además se presume que el acusado también benefició económicamente a los particulares Jesús Roberto Aveitia Martínez y Silvino Rodríguez.