Francisco Chávez
El Diario
Molestia entre automovilistas causó el cierre de calles principales debido a la realización de un maratón pedestre en el que denunciaron la falta de señalamientos y desvíos adecuados del tráfico vehicular.
Tal percance vial se acentuó en los conductores que fueron sacados de la avenida Heroico Colegio Militar, quienes congestionaron las calles del Parque El Chamizal, para después retornar por la avenida Abraham Lincoln, y por último girar a la derecha por el Malecón y continuar su camino.
“Pues nomás avisan que van a cerrar calles pero no ponen señalamientos para no hacer tanto rodeadero”, expresó un conductor de nombre Francisco Ramírez.
El cuerpo que lleva la circulación de poniente a oriente en la avenida Heroico Colegio Militar, justo en el tramo que está entre 5 de Mayo y Pérez Serna, quedó clausurado al tráfico vehicular desde las 7:30 horas de ayer.
También quedó cerrada la avenida de las Industrias o Antonio J. Bermúdez, en los carriles que van de norte a sur desde Juan Pablo II hasta el bulevar Tomás Fernández.
Mientras, la Tomás Fernández fue obstruida desde la entrada al Tecnológico de Monterrey hasta el retorno que está después de la segunda glorieta de Campos Elíseos.
La desviación del tráfico vehicular también tuvo impacto en vías que conectan con el bulevar Juan Pablo II, tales como la Rafael Perez Serna, Arizona, Plutarco Elías Calles, Universidad, y Adolfo López Mateos, se pudo observar en un recorrido.
La circulación por esas arterias regresó a la normalidad aproximadamente a las cinco de la tarde de ayer, informó personal encargado del evento.
El trayecto del “Quinto Maratón Internacional Gas Natural” inició justo frente al estadio Olímpico Benito Juárez, ubicado sobre la Heroico Colegio Militar, continuando hacia el oriente por esa arteria hasta llegar a Juan Pablo II, para arribar después a la Antonio J. Bermúdez y tomarla hacia el sur.
El contingente de participantes siguió por esa vía hasta Tomás Fernández para tomar de nuevo al oriente rumbo a Campos Elíseos, para después regresar por las mismas avenidas para concluir en el estacionamiento del estadio Benito Juárez.
Durante el desarrollo del circuito, los competidores fueron escoltados por agentes viales a bordo de motocicletas. Mientras que tránsitos pedestres cuidaron el flujo adecuado de los corredores.
En el interior de las instalaciones deportivas se instalaron carpas, donde se ofertaron antojitos mexicanos, y hubo música, un área infantil, demostraciones deportivas, lucha libre, teatro guiñol y parte de las exhibiciones de La Rodadora.
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