Martín Orquiz
El Diario
Con el argumento de que existen diferencias profundas entre la forma institucional de trabajar de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH) y la suya, Gustavo De la Rosa Hickerson hizo pública su renuncia al puesto de visitador del organismo.
Indicó que aunque quedó en buenos términos laborales, tuvo discrepancias en cuanto al estilo de desarrollar su labor, por lo que decidió separarse.
Expresó que tenía a un grupo de estudiantes becados que lo apoyaban en sus tareas, pero ya no le permitieron utilizarlo, ni a su secretaria.
En fechas recientes, a través de la CEDH de la Rosa Hickerson se hizo cargo de proyectos para ayudar a las comunidades de Villas de Salvárcar, Anapra y de uno más en busca del acercamiento entre los policías y la ciudadanía.
Comentó que ahora se dedicará, como particular, a defender los derechos humanos de los fronterizos, dado que en ocasiones las víctimas se topan con la burocracia de la CEDH antes de que se comience a trabajar en sus casos.
El abogado fue designado visitador de programas especiales el 10 de junio del 2005.
Adolfo Castro Jiménez, primer visitador de la CEDH, declaró que los argumentos de De la Rosa son opiniones personales.
“Lo que supe es que su renuncia fue por cuestiones personales, él no quería estar ahí, nadie lo corrió”, indicó. “La forma de trabajar es el sistema, él lo llama burocracia, pero así es el sistema interno”.
En cuanto a la gente que lo ayudaba, dio a conocer que no pertenece a la CEDH y que laboraban en proyectos ajenos a la instancia.
Desde esta semana comenzó a atender en su despacho particular en la calle Bolivia 223 norte, mientras que mantendrá disponible para las víctimas su número de celular (656) 176 59 87.
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