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El Diario
Fernando Vargas Molina, quien presuntamente golpeó hasta dejar por muerta a su novia, ayer se presentó ante un Tribunal de Garantía luego de que el Juzgado Sexto de Distrito le ordenó que acudiera a la diligencia ante el juez local.
El sospechoso obtuvo un amparo del juzgado Sexto federal, pero el titular Alejandro Vega Nieto le ordenó que se presentara a enfrentar el proceso judicial, por lo que se realizó una audiencia y fue acusado de los delitos de violencia familiar y lesiones calificadas.
El juez local, Antonio Coss Araujo, no le permitió al Ministerio Público solicitar medidas cautelares aduciendo que aún tiene la protección de la justicia federal por la suspensión provisional y definitiva que le concedió su homologo federal.
“Se está presentando en virtud de un mandamiento de autoridad federal, por lo tanto mientras no cambie la situación jurídica para no violentar derechos fundamentales también del joven Fernando Vargas Molina no hay lugar a debate sobre esto (la medida cautelar). Mientras no cambie la situación jurídica”, dijo Coss Araujo.
Por lo que no se le fijó ninguna medida, únicamente se le citó a una audiencia de vinculación a proceso. Al presentar la acusación, una agente del Ministerio Público dijo que el pasado 16 de agosto entre las 02:00 y las 02:30 horas en las inmediaciones del número 539 de la calle Insurgentes Fernando Vargas Molina realizó un acto abusivo de poder, tendiente a someter psicológica y físicamente a la víctima Laura Alejandra Guerra Reynoso, con quien tenía una relación de noviazgo.
Indicó que la pareja se encontraba a bordo de una camioneta Suburban de color azul, cuando Laura Alejandra le dijo a Vargas Molina que se quería bajar del vehículo porque ya no quería estar con él. Ante lo cual Fernando Vargas Molina comenzó a golpearla a puñetazos y puntapiés, la jaló del cabello y a pesar de que ella ya se encontraba tirada en el piso y expresó que la estaba causado dolor, él no se detuvo.
La fiscal refirió al Tribunal que esta agresión le ocasionó a la víctima un daño emocional al restringirle su autodeterminación así como alteraciones en su salud. Pues presentó una fractura nasal que requirió una reparación quirúrgica, equimosis violácea y aumento de volumen en la barbilla, maxilar izquierdo, en el pabellón auricular izquierdo así como en el hombro derecho; escoriaciones en el hombro izquierdo, en la escapula derecha; equimosis y aumento de volumen en la región lumbar bilateral y en el brazo izquierdo.
Las lesiones fueron clasificadas por dos médicos legistas como las que no ponen en peligro la vida, tardan más de 60 días en sanar y dejan consecuencias médico legales por el riesgo de una mala consolidación ósea y dolor en el pabellón auricular izquierdo.
Además de citar los delitos de lesiones calificadas y violencia familiar, la agente del Ministerio Público fundó su acusación en la Ley Estatal del Derecho de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia; la Convención Sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación Contra la Mujer (CEDAW) y la Convención de Belem do Pará, estas dos últimas a las que está suscripto el Estado Mexicano.
El pasado 19 de agosto un Tribunal de Garantía diverso calificó de ilegal la detención de Fernando Vargas Molina y lo dejo en libertad, esto debido a la manera en que lo detuvieron y la mala elaboración del reporte policial.
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