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El Diario
El presunto asesino de Cristal Fernández Pinela, Alberto Isaac Hernández Campa podría alcanzar una sentencia de 62 años de edad de cárcel, así lo señaló ayer el Ministerio Público al culparlo del delito de homicidio agravado por el sexo de la víctima y calificado por la traición, alevosía y saña con que presuntamente actuó.
Además también le formuló cargos por el ilícito contra las normas de inhumación y exhumación de cadáveres.
A la diligencia acudieron los familiares del acusado; ya avanzada la diligencia uno de ellos gritó “ya”, ante los reiterados señalamientos de culpabilidad referidos por parte del agente del Ministerio Público contra Hernández Campa quien declinó rendir declaración.
Para solicitar que se declarara de legal la detención de Hernández Campa que se hizo bajo la figura legal de caso urgente, el titular de la Fiscalía Especializada en Atención de Mujeres Víctima de Delitos por Razones de Género, Miguel Luna, dijo a la juez de Garantía Brisa Yadira Meraz Mendoza que los trabajos los iniciaron el pasado 10 de septiembre por parte de los agentes investigadores de la Unidad de Personas Desaparecidas o Ausentes y ante el reporte presentado por la madre de Cristal, Socorro Pinela González.
El trabajo de investigación obtuvo resultados luego de que a los ministeriales les pareció sospechoso que Alberto Isaac hubiera vendido como chatarra su camioneta Ford Ranger modelo 1994 al yonque “Cinco Puntos”; los elementos acudieron al negocio y al revisar el automotor se dieron cuenta que le faltaba el asiento del lado del copiloto y parte de la alfombra de ese lado. Después de que se habían realizado varias entrevistas ministeriales a Alberto Isaac, el domingo 14 de septiembre, la agente Mayra Alejandra García Aldaba logró que el presunto homicida le confesara lo ocurrido.
Hernández Campa le indicó que el martes 9 de septiembre la víctima le había llamado y quedaron de verse en el estacionamiento de una tienda. Ambos acudieron a la cita y a bordo de la Ford Ranger se trasladaron a un motel, pues de acuerdo a la declaración del sospechoso Cristal le pidió que la llevara al motel “La Escondida”.
Presuntamente en ese lugar ambos tomaron bebidas embriagantes y sostuvieron relaciones sexuales. Cuando ya iban de regreso, por el automóvil de Cristal al estacionamiento de la tienda, la mujer le confesó que se iba a ir a vivir con otro hombre y esto provocó una discusión, dijo el fiscal al Tribunal.