El Diario
2014-09-14
Para los negocios y personas que habitan en zonas aledañas a Ramón Rayón y carretera Juárez Porvenir, las obras del Plan de Movilidad Urbana (PMU) que se ejecutan actualmente en este punto parecen no tener fin.
A poco más de un año de que se abriera el frente, el cierre de calles y trabajos han colapsado a negocios de la zona, llevándolos incluso al cierre; el más reciente, un estudio de fotografía que cerró hace un mes, declararon vecinos del sector.
Mientras que los que han logrado sobrevivir tienen su circulación prácticamente limitada, pues, según dijo Juan López, empleado de una mueblería sobre la calle Ramón Rayón, la obstrucción les ocasionó la pérdida de clientes y pedidos.
“Los clientes no saben por dónde llegar. Llaman y preguntan, nosotros más o menos les explicamos, pero el simple hecho de saber que está todo el desastre los hace desistir”, declaró.
Mauricio Olivares, encargado de una papelería ubicada a escasos metros de la mueblería donde labora Juan López, dijo que la obstrucción en la calle Ramón Rayón generó una afectación de la cual ve muy difícil poder recuperarse.
“La falta de circulación nos pegó. Perdimos clientes y la caída en ventas fue considerable. La obra no tiene para cuándo y, al menos en mi caso, vemos muy complicado que podamos levantarnos de nuevo”, dijo.
El punto entre Ramón Rayón y la carretera Juárez Porvenir se encuentra bloqueado, pese a que desde hace meses no se observaran trabajadores en esa zona, mencionaron comerciantes y vecinos del sector.
Esta obstrucción, señaló el encargado de la papelería, no sólo afectó en lo comercial, ya que en época de lluvias ocasiona que el agua se estanque e incluso la precipitación se meta al interior de los negocios. (Cinthya Ávila)