Luz del Carmen Sosa
El Diario
Norma Itzel llegó a su casa. Cincuenta horas después de que salió de su hogar para asistir a clases, la estudiante de la preparatoria Rodolfo Fierro está en su hogar con su familia.
Sus padres aún no la han visto. Ellos acudieron a la Fiscalía General del Estado a otorgarle el perdón a Sofía Rueda González.
"Ella no es una asesina, es una mujer que de corazón ayudaba a mi sobrina; ella no merece estar en la cárcel, tiene que estar con sus hijos", dice José Ventura, tío de la joven de 17 años que murió en el accidente vial ocurrido el lunes pasado en el Camino Real.
En choque fatal fallecieron Norma Itzel y su mejor amigo Adrián Pacheco Ávila, de 17 años. Ambos venían de la escuela y su vecina Sofía les ofreció un aventón, pues son vecinos de la colonia La Campesina, ubicada al surponiente de la ciudad.
El cuerpo de la adolescente es velado a partir de este miércoles a las 11:00 horas, pues la familia se negaba a firmar documentos que no entendían y eso retrasó la entrega del cuerpo.
"Los agentes de la Fiscalía General del Estado venían a exceso de velocidad, pero para ellos no hubo sanción" reprueba el tío.
Sin embargo, la familia de Norma Itzel sólo pide que la Fiscalía, en un gesto de humanidad, retire los cargos por daños contra la conductora de la camioneta Lumina en la que viajaban cuatro personas.
Más tarde, este mismo día, Adrián será sepultado.