Luis Chaparro
El Diario
La crisis de violencia que se vivió en Ciudad Juárez durante los años pasados hizo que el número de guardias de seguridad privada operando aquí superara al de agentes de la Policía Municipal, según cifras de la misma dependencia, y, según la Oficina de Seguridad Pública de la Comisión Nacional de Seguridad, esto ayudó “en un 80 por ciento” a la reducción del índice de inseguridad.
Según datos de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal, de 2009 a la fecha los habitantes de Ciudad Juárez han contratado casi cuatro veces más elementos de seguridad privada que el número existente de oficiales de la Policía.
Actualmente existen mil 690 agentes activos, luego de que unos 900 fueran despedidos durante 2013 por no pasar los rigurosos exámenes de confianza impuestos por Julián Leyzaola. En contraste, hay 6 mil 733 guardias de seguridad privada activos y registrados por la misma dependencia, más unos 2 mil que operan fuera de la ley.
La fuerte presencia de compañías de seguridad privada, ayudó en gran medida a que los índices de seguridad en Ciudad Juárez mejoraran, según concordaron expertos de seguridad durante la Cumbre de Seguridad en la Frontera México-EU (Mexico-US Border Security Summit) llevado a cabo ayer en El Paso, Texas.
Uno de los ponentes fue Juan Antonio Arámbula, director de la Oficina de Seguridad Privada de la Comisión Nacional de Seguridad de México, quien aseguró que el resultado del trabajo de las compañías de seguridad privada en Ciudad Juárez fue “una mayor y mejor percepción de tranquilidad y seguridad en la ciudad”.
“Cuando Ciudad Juárez pasaba por su punto más crítico, fue necesario tomar medidas extraordinarias y hacer un trabajo conjunto, utilizar todas las herramientas que teníamos en mano, incluyendo la seguridad privada. El resultado fue un descenso en los índices de criminalidad.”, expresó Arámbula.
De acuerdo con Arámbula, el 80 por ciento del crédito en la reducción de homicidios y crímenes violentos en Ciudad Juárez se lo llevan las compañías de seguridad privada.
“Eso y el gran esfuerzo de las autoridades mexicanas y la sociedad civil que estaba harta de la violencia, jugaron un papel muy importante para llegar a la tranquilidad en la que vive ahora Ciudad Juárez”, comentó durante su conferencia.
Arámbula agregó que el presidente de la República, Enrique Peña Nieto, está buscando la manera de trabajar más de cerca con las compañías de seguridad privada en materia de prevención, personal, equipo y tecnología que ayuden a reducir la violencia en México.
Para el visitador de la Comisión Estatal de Derechos Humanos en Ciudad Juárez, Gustavo de la Rosa Hickerson, ese es el único indicador confiable de la percepción de seguridad de los habitantes de Juárez.
“Esto significa que la gente tiene temor y dudas respecto a su seguridad”, expuso el derechohumanista. Además consideró que “dice mucho” sobre la confianza de los ciudadanos en las autoridades locales.
“Si la ciudadanía ha decidido contratar agentes de seguridad privada es porque sienten que el servicio de seguridad pública no es suficiente.
“La seguridad privada ha sido una especie de apoyo invisible porque a la Policía no le conviene reconocer que hay una fuerza que les ayuda y que el servicio de seguridad pública no es suficiente”, afirmó.
El derechohumanista, quien prefiere llamar a los elementos de seguridad privada, “vigilantes”, dice que esta ayuda podría generalizarse e incluso apoyar al gobierno local pues no le cuesta al municipio.
En los últimos años el índice de homicidios se ha reducido drásticamente en Ciudad Juárez. Según las cifras de la Fiscalía General de Chihuahua, durante los primeros tres meses de 2014 se registraron 112 asesinatos en comparación con 679 registrados durante 2010.
El doctor Arturo Valenzuela, ex presidente de la Mesa de Seguridad de Ciudad Juárez, consideró que Ciudad Juárez es seguro para quien tiene los medios, lo que es alarmante porque se está creando una ciudad donde la seguridad está fragmentada.
“Lo que necesitamos es una policía de proximidad y no escoltas de seguridad privada que protegen a ciertas esferas. De la misma manera el jefe de la Policía debería ser elegido por el pueblo y no por el alcalde, de otra manera todos son pseudo policías que fragmentan la seguridad pública”, dijo Valenzuela.
Aun así, el doctor Valenzuela afirma que la situación actual de Ciudad Juárez es incomparable con aquella del 2010 y que pronto podría ser la ciudad “más segura de México”.
“Estamos bastante mejor, creo que si seguimos trabajando como hasta ahora vamos a mejorar más y nos estamos proponiendo ser la ciudad más segura de México”.
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