Berenice Gaytán
El Diario
La avalancha de aumentos que desencadenarán la reforma fiscal y los impuestos estatales, provocará lo que economistas califican como “la peor cuesta de enero” que sufrirán los juarenses.
Los analistas coincidieron en que a los aumentos “normales” de cada año, se suman los que traerá la homologación del Impuesto al Valor Agregado (IVA) que subirá mínimamente un 5 por ciento los precios.
Incluso, señalaron que los aumentos se comerán fácilmente el incremento al salario mínimo que será, para las zonas A y B en 2014, de 3.9%, equivalente a 2.52 pesos.
Es decir, que quedará en 67.29 pesos para los municipios de Guadalupe, Juárez y Praxedis G. Guerrero.
Algunos de los servicios que se verán afectados por la homologación del IVA son: el agua, la luz (comercial), cable, teléfono y el flete. Sin dejar atrás algo tan necesario como el gas LP.
De acuerdo con los especialistas, ni los productos básicos –que en teoría no pagan IVA– se salvarán ya que éstos también aumentarán de manera indirecta por el incremento en los precios de empaque y flete.
La Reforma Fiscal aprobada este año incluye subir del 11 al 16 por ciento el IVA en la frontera para homologar la tasa en todo el país.
A este aumento se le suman los incrementos “normales” de cada año en productos y servicios, así como el aumento de impuestos estatales.
El Impuesto Sobre la Nómina en el estado aumentará de un 2 a un 3 por ciento, lo que representa un costo extra para las empresas y otro aumento en los costos.
La economista Erika Donjuan Callejo, señaló que ante todo este escenario, Juárez vivirá en este 2014 la peor cuesta de enero.
Agregó que ante la pérdida del poder adquisitivo de los trabajadores la pobreza aumentará en la ciudad, lo que pudiera desatar otra ola de inseguridad.
El economista Alfonso Arenaza Cortés, señaló que la reforma fiscal en general, será un duro golpe para la economía juarense que aún no se recupera de la pasada crisis.
Indicó que un aumento del IVA provocará de tajo un fuerte incremento en el precio de productos y servicios, lo que será un golpe directo al bolsillo de los ciudadanos.
“Si hoy no alcanza (el dinero), mañana menos”. Esta reforma es una política fiscal restrictiva, no es cierto que las cosas no van a cambiar, nos van a seguir desangrando”, dijo.
Carlos Escobar Royval, presidente de la Cámara Nacional de Comercio local, señaló que las empresas no podrán absorber el incremento al IVA y lo trasladarán al precio de los productos.
La acción traerá una baja en el consumo y ventas y será muy complicado que los comercios sobrevivan, pues aún no logran recuperarse de la crisis.
El fiscalista José Luis Reyes Castorena, señaló que con la homologación y los cambios al ISR, no sólo los juarenses ganarán menos y pagarán más, sino que corren el riesgo de perder su empleo y que la ciudad se vuelva entonces un caos.
Indicó que ante el incremento de impuestos y menos deducibles, las empresas se reestructurarán y eso se traduce en desempleo, que a la vez impulsará la informalidad.
El experto fiscal reiteró que 2014 será un año muy difícil y que además de enero, quizá sea a partir marzo cuando se sienta el efecto más fuerte de las reformas, principalmente la fiscal.
Manuel Sotelo, presidente de la Asociación de Transportistas en la ciudad, señaló que la preocupación más grande en medio de todo el negro panorama, es que el desempleo vuelva a generar los altos índices de violencia que registró Juárez hace poco más de un año.
El fiscalista Alejandro Enriquez Mariscal, señaló que la reforma fiscal mermará el lento crecimiento de la ciudad y las empresas no tendrán otra opción que recurrir a las reestructuraciones y los amparos.
Además de la homologación del IVA, la reforma fiscal incluye gravar con un peso por litro las bebidas saborizadas, concentrados, polvos, jarabes, esencias o extractos con azúcares añadidas. Además de las bebidas alcohólicas. Esto dentro del Impuesto Especial de Productos y Servicios.
También el impuesto de un 5 por ciento a los alimentos de alta densidad calórica o “chatarra” como frituras, confiterías y dulces y el impuesto de 16 por ciento a la compraventa de mascotas y los alimentos de éstas.
La iniciativa incluye además el IVA a las importaciones temporales de la industria maquiladora que entrará en vigor hasta 2015.
También establece los cambios en las tasas del Impuesto Sobre la Renta.
Las personas con ingresos mayores de 500 mil pesos anuales pagarán una tasa de 31 por ciento, mientras que los que ganen más de 750 mil pesos pagarán una tasa de 32 por ciento.
Quienes obtengan ingresos por encima de un millón de pesos anuales pagarán una tasa de 34 por ciento, y quienes perciban más de 3 millones de pesos anuales pagarán una tasa máxima de 35 por ciento.
También se avaló imponer una tasa de 10 por ciento sobre la ganancia que obtengan las personas físicas en acciones y dividendos a través de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV).
Y se confirmó la desaparición del Impuesto Empresarial a Tasa Única y el Impuesto a los Depósitos en Efectivo (IDE), con el fin de que los ingresos empresariales estén gravados sólo en el ISR. (Berenice Gaytán/El Diario)
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