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Para cena de Navidad, juarenses prefieren los mercados: comerciantes

Mariana Fernández Muñoz
El Diario

2013-12-22

A pesar de la publicidad que manejan las grandes cadenas para la cena de Navidad, comerciantes  de la zona Centro expresan que los juarenses los prefieren debido a los bajos precios.
Con frases como “¡pásele, pásele!”, “venga, ¿qué le damos?”, los vendedores de la calle La Paz, atraen a los transeúntes que buscan los ingredientes para preparar el menú del 24 de diciembre.
Para Emilio Gasco, de 37 años, un vendedor de quesos menonitas, chile y hojas para tamales, la venta en estos días ha estado muy baja en comparación con años anteriores, considerando a los supermercados su competencia directa.
“Aquí tú puedes negociar con los tenderos o inclusive comparar con otros locales, ahí el gancho es la publicidad de que a lo mejor un producto está muy barato, pero al ya estar ahí uno compra de más y termina gastando lo que no tenía previsto”, dijo.
Sin embargo expresaron que ayer hubo menor flujo de clientes en comparación con el sábado, a pesar del cambio de temperatura.
“Nosotros somos los negocios de los pobres, a nosotros esas cosas no nos hacen nada”, dijo Mario Salazar, encargado de un pequeño puesto de frutas y chiles diversos.
Clientes de estos negocios comentaron que prefieren realizar sus compras en ese sector debido a que los precios son más accesibles y presentan mayor variedad en sus productos.
Tenderos dijeron que la mercancía que más se ha vendido para la cena de Navidad han sido las hojas para tamal, chile colorín y la carne de puerco, puesto que al parecer los juarenses prefieren comer tamales para la fecha.
Sin embargo, otros utilizan su creatividad para hacer un platillo fuera de lo común debido a los gastos que se presentaron durante el año.
“Nosotros vamos a hacer tacos de cabeza, en esta ocasión se nos antojó”, dijo Érika, de 26 años, quien trabaja en una imprenta.
No obstante, al preguntarle a Érika su situación económica durante las fechas comentó que ha tenido que aprovechar su aguinaldo para dar abonos en las deudas que dejaron los préstamos que solicitó durante el año.
“A nosotros nos gusta venir aquí porque no estamos en una buena situación económica y si vamos a los supermercados a comprar lo de la cena está todo muy caro, y aquí por ejemplo compramos cinco manzanas y nos regalan otras dos”, dijo Pedro, de 38 años, quien adquiría los ingredientes necesarios para la noche del 24.
mfernandez@redaccion.diario.com.mx

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