Angélica Villegas
El Diario
Alrededor de 218 licencias con permiso para la venta de cervezas, vinos y licores se encuentran en la “charola de cancelación”, dio a conocer ayer Ángel Olivas Rico, jefe de Gobernación en esta localidad.
Expuso que existen casos de personas que deben el costo de la revalidación de la licencia desde hace más de cinco años.
El funcionario indicó que la principal problemática con la que cuenta la dependencia es que el sistema admite el pago de los deudores.
“El usuario tiene oportunidad en mayo para pagar sin recargos, pero si llega el mes de septiembre y no se hizo el pago, la ley dice en términos muy tajantes que quedan canceladas”, indicó Olivas Rico.
De acuerdo con lo señalado en el artículo 28 de la Ley que regula el funcionamiento de establecimientos en los que se expenden, distribuyen o ingieren bebidas alcohólicas, se estipula que la duración de las licencias tiene una duración indefinida, sin embargo, éstas serán revisadas por personal de Gobernación anualmente.
En el mismo artículo se indica que cada año durante abril se realizará el titular de una licencia debe comprobar ante el departamento que ha presentado a su nombre, declaración anual del Impuesto al Valor Agregado o el que lo sustituya, el Impuesto sobre Nóminas al Estado y el pago de las cuotas del Instituto Mexicano del Seguro Social, que corresponde al establecimiento.
De no presentarse lo anterior, al usuario se le cancelara la vigencia de operación de la licencia a partir del primero de septiembre siguiente, según se estipula en la ley.
Sin embargo, hasta el momento ninguna licencia ha sido cancelada, debido a la manera con la que opera el sistema de Gobernación.
“Yo siento que mientras al sistema no se le haga una depuración de fondo, puede recibirse el pago de deudores. Sin embargo, esto no está autorizado por la ley al 100 por ciento, ya que toda licencia debe pagar su revalidación en el mes de abril”, agregó.
El funcionario refirió que hasta el momento, el rezago con que cuenta la oficina por la revalidación de licencia es de entre un millón y medio y dos millones de pesos.
Mencionó que actualmente la oficina de Gobernación tiene registrado un padrón de mil 554 licencias con permiso para el consumo y comercialización de bebidas embriagantes, sin incluir a las tiendas de abarrotes, de las cuales 399 se encuentran pendientes de pago.
Sin embargo, el funcionario explicó que del total de usuarios que está pendiente en solventar el pago de la revalidación sólo 211 se encuentran en activo de manera regular, es decir, que 218 tienen adeudos desde hace más de cinco años, así como algunas licencias están a nombre de personas que ya fallecieron.
“Existen 188 casos que tienen adeudos anteriores al 2013, hay desde el 2007, 2008. Además hay 30 casos de defunción. Por eso, hay 218 en la hipótesis de que sean canceladas por Gobernación Estatal”, dijo.
Comentó que de ser canceladas estas licencias en “desuso”, Gobernación contaría con un padrón de mil 336 licencias en regulares condiciones.