Staff
El Diario
Restos óseos de cuando menos seis personas más que fueron sepultadas clandestinamente en narcofosas de un rancho del Ejido Jesús Carranza, en el Valle de Juárez, fueron localizados la tarde del sábado por peritos y antropólogos forenses de la Fiscalía General del Estado.
Aparte de los huesos que se localizaron, las autoridades encontraron pantalones, calzado y ropa correspondientes a seis hombres que estaban dentro de fosas que se abrieron al interior del rancho “La Colorada”, se informó de manera extraoficial.
Con este hallazgo, la cifra de osamentas o restos humanos localizados en el sitio aumentó a 17. En total fueron 25 los hoyancos o fosas que se abrieron por parte de los investigadores.
El rastreo se realizó en la zona mencionada, ubicada a la altura del kilómetro 35 de la carretera Juárez-Porvenir, a tres kilómetros al suroeste del ejido Jesús Carranza, cerca de “Los Arenales”, comentó uno de los investigadores, quien pidió guardar su identidad.
Identificarán los restos con estudios de ADN
Personal de Servicios Periciales, entre los que se encuentran antropólogos, químicos, odontólogos, médicos forenses y genetistas, participaron en la recuperación y levantamiento de los restos para comenzar el trabajo tanatológico que permitirá determinar el tiempo aproximado del deceso y sus posibles causas.
Para ello se deberán de clasificar y agrupar los restos óseos, a fin de determinar la correspondencia de cada uno de ellos, previo al trabajo de identificación por medio de estudios de ADN, informó.
Los huesos serán comparados con los perfiles genéticos que se tienen de familiares de extraviados desde el 2008, se dio a conocer.
Ayer, en un recorrido por el sitio donde se ubicaron las narcofosas, se pudo apreciar que los trabajos de la Fiscalía seguirán, debido a que se tiene resguardado un terreno amplio donde colocaron cintas amarillas y listón rojo preventivo.
En el lugar se colocaron letreros donde se advierte que el predio se encuentra asegurado debido a una investigación por parte de la Fiscalía, sin embargo, no había vigilancia en el sitio.
En algunos espacios se colocaron varillas con cordones rojos, como señal de los lugares donde pudiera haber más restos.
Habitantes del ejido Jesús Carranza señalaron que ese sitio se encontraba abandonado y apenas el lunes pasado vieron movimiento de camionetas que ingresaban al lugar tripuladas por policías federales, de la Fiscalía estatal y unos más con apariencia de estadounidenses.
Uno de los vecinos aseguró que los que daban instrucciones eran los extranjeros, quienes tomaron fotografías del lugar por espacio de tres horas y marcaban algunos lugares, donde el miércoles y jueves se hicieron las excavaciones.
Manifestó que después del mediodía del lunes, un helicóptero llegó hasta el lugar y descendió en un predio cercano para que lo abordaran tres supuestos estadounidenses, quienes desde el aire estuvieron tomando más fotografías.
El martes no hubo movimiento, aseguró el testigo.
La madrugada del miércoles, los pobladores fueron sorprendidos de nueva cuenta por decenas de policías estatales que sitiaron el ejido, irrumpieron en el predio La Colorada y comenzaron a remover la tierra con picos, palas y herramienta que llevaban, indicó.
De manera extraoficial se dio a conocer que la localización de las fosas clandestinas, se logró gracias al intercambio de información que tiene el Gobierno de Chihuahua con autoridades norteamericanas.
Las autoridades de ambos países utilizaron la información que proporcionó José Antonio Hernández Acosta “El Blablazo” o “El Diego”, ex líder del grupo “La Línea”, sobre la ubicación de decenas de personas que fueron ‘levantadas’, asesinadas y sepultadas en los años 2008, 2009 y 2010.
La Fiscalía no ha dado a conocer de manera oficial la cantidad de osamentas o restos localizados.
Se espera que hoy lo hagan y se brinde mayor información con relación al trabajo de investigación.