El Diario de Juárez
2018-06-02
En el resort de una isla que está fuera de la costa de Singapur, los estadounidenses encargados de planear el evento están trabajando día y noche con sus contrapartes de Corea del Norte para organizar la cumbre para dar por terminado el programa de armas nucleares de Pyongyang.
Sin embargo, hay un problema logístico particularmente complicado que aún no ha sido resuelto, de acuerdo a dos personas que están familiarizadas con las pláticas...
¿Quién va a pagar la estadía en el hotel de Kim Jong Un?
Ese orgulloso pero pobre país requiere que un país extranjero le pague los gastos y ese alojamiento preferencial: el Fullerton es un magnífico hotel neoclásico que está cerca de la boca del río Singapur, en donde sólo una suite presidencial cuesta más de 6 mil dólares por noche.
Si se trata de pagar el alojamiento en ese lujoso hotel de cinco estrellas para Corea del Norte, Estados Unidos está dispuesto a cubrir los costos, pero le preocupa que Pyongyang pueda considerarlo como un insulto.
Como resultado de eso, los estadounidenses que están a cargo del evento están considerando pedir al país anfitrión, Singapur, que pague los costos de la delegación norcoreana.
“Es algo irónica la insistencia de Corea del Norte de ser tratado en igualdad de condiciones”, comentó Scott Snyder, experto en Corea del Consejo de Relaciones Exteriores.
Este régimen, que ha sido muy sancionado y aislado, tiene un largo historial de hacer atrevidas exigencias monetarias.
Durante las Olimpíadas de 2018 en PyeongChang, Corea del Sur pagó 2.6 millones de dólares para alojar a un grupo de porristas norcoreanas, una delegación artística y demás integrantes.
En esos mismos Juegos Olímpicos, el Comité Olímpico Internacional pagó los gastos de viaje de 22 atletas norcoreanos que asistieron al evento.
“Corea del Norte tiene dinero para construir armas nucleares y misiles, pero dicen que son demasiado pobres para pagar los costos de viaje al extranjero”.
Cualquier pago por el alojamiento de Corea del Norte podría entrar en conflicto con las sanciones impuestas por del Departamento del Tesoro, comentó Elizabeth Rosenberg, exfuncionaria del Tesoro.
La transacción podría requerir que la Oficina de Control de Activos Extranjeros “suspendiera temporalmente la aplicación de esas sanciones”, a través de una exención, dijo.
Se espera que Estados Unidos solicite esas exenciones a las Naciones Unidas y el Tesoro para cubrir una serie de pagos relacionados con el viaje de Corea del Norte, aunque una larga lista de exenciones podría dar lugar a un escrutinio.
“Existen mecanismo legítimos para esas exenciones, dependiendo de las circunstancias, pero eso podría dar lugar a críticas del público y de los políticos y enviarle un mensaje equivocado a Corea del Norte”, comentó Duyeon Kim, un experto no partidista de Seúl.
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