El Diario de Juárez
2017-11-06
Este lunes el presidente de EU, Donald Trump dijo que Japón podría protegerse de Corea del Norte y sus armas nucleares adquiriendo equipo militar estadounidense por miles de millones de dólares, haciendo explícitamente un nexo entre el comercio y la seguridad al iniciar en Asia una compleja gira de tintes políticos, dijo de The New York Times.
Por momentos generoso y luego desafiante, Trump saludó al primer ministro Shinzo Abe como uno de sus mejores amigos en el club de líderes mundiales. Pero despotricó contra lo que consideró representaban desequilibrios comerciales crónicos con Japón, además de reconocer tácitamente su descontento por el hecho de que Abe no hubiera derribado los misiles que Corea del Norte hace poco lanzó sobre Japón.
“Los quitará del cielo disparándoles cuando concluya la compra de numeroso equipo militar adicional de Estados Unidos”, dijo Trump, de pie junto a Abe en el Palacio Akasaka de Tokio. “El primer ministro japonés va a estar comprando grandes cantidades de equipo militar, como debe de hacer”.
“Se trata de numerosos empleos para nosotros y mucha seguridad para Japón”, añadió el presidente.
Trump se mantuvo alejado de las declaraciones provocadoras sobre Corea del Norte y su mandatario, Kim Jong-un, a las cuales había recurrido. Pero defendió su manejo de dichas expresiones, sugiriendo que la reticencia de sus antecesores a hacer ese tipo de declaraciones ha envalentonado a Kim.
“Hay quien dice que mi retórica es muy fuerte, pero miren lo que ha sucedido en el curso de los últimos 25 años con la retórica muy débil”, señaló Trump. “Miren dónde nos encontramos ahorita”.
En un desayuno previo con ejecutivos de Japón y Estados Unidos, Trump criticó con dureza la relación comercial entre ambos países. Japón, aseguró, prácticamente no ha traído automóviles de Estados Unidos mientras que exporta millones de vehículos al mercado estadounidense.
“Traten de fabricar sus automóviles en Estados Unidos en vez de mandarlos para allá”, dijo Trump, ignorando el hecho de que las automotrices japonesas han construido enormes plantas de montaje en Estados Unidos.
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