Associated Press
2017-09-04
Seúl, Corea del Sur— Corea del Sur disparó ayer misiles hacia el mar para simular un ataque contra la principal zona de pruebas nucleares norcoreana, después de que Estados Unidos amenazara a Corea del Norte con una “respuesta militar masiva” por haber realizado su mayor ensayo atómico el fin de semana.
La fuerte retórica de Estados Unidos y las maniobras militares en Corea del Sur se están volviendo respuestas frecuentes al rápido desarrollo de misiles por parte de Pyongyang con los que pueda bombardear territorio estadounidense.
En Corea del Sur, Chang Kyung-soo, funcionario del Ministerio de Defensa, dijo a legisladores que Seúl está viendo que Corea del Norte se está preparando para realizar una prueba con un misil balístico intercontinental, pero no dio detalles sobre cómo las autoridades habían llegado a dicha conclusión.
Chang también dijo que la reciente detonación nuclear al parecer fue de unos 50 kilotones, lo que sería un “incremento importante” en comparación con otros ensayos.
El presidente Donald Trump amenazó con frenar todo el comercio con países que hagan negocios con Pyongyang, una amenaza velada para China, y criticó a Corea del Sur por lo que calificó de “discurso de apaciguamiento”.
En respuesta, el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores chino, Geng Shuang, dijo a periodistas en Beijing que China considera “inaceptable una situación en la que por un lado trabajamos para resolver este asunto pacíficamente, pero por otro lado nuestros propios intereses estén sujetos a sanciones y en riesgo”.
Según Corea del Norte, el sexto ensayo nuclear norcoreano fue una bomba de hidrógeno, el más potente ensayo nuclear de Pyongyang, que ya aseguró que es suficientemente pequeña como para ser montada en un misil intercontinental.