New York Times News Service
2017-09-04
Nueva York— El líder de Corea del Norte, Kim Jong-un, “está pidiendo la guerra”, dijo al Consejo de Seguridad Nikki R. Haley, embajadora de Estados Unidos ante las Naciones Unidas.
Su comentario se produjo un día después de la prueba nuclear más poderosa del norte, y horas después de que funcionarios de Corea del Sur dijeron a los legisladores que Corea del Norte se estarían preparando para lanzar otro misil balístico para conmemorar el aniversario de la fundación de su gobierno en los próximos días.
Haley dijo al Consejo en una reunión de emergencia. Ya no queda más camino.
La embajadora no amenazó la acción militar unilateral de Washington o repitió la declaración del presidente Trump en Twitter de que el llamado de Corea del Sur para más diplomacia era una forma de “apaciguamiento”. En cambio dijo que “ha llegado el momento de agotar toda nuestra diplomacia posible antes de que sea demasiado tarde.
Es la segunda vez en menos de una semana que el Consejo de Seguridad se ha reunido para discutir sobre Corea del Norte y la décima, en este año.
El mes pasado, el Consejo reforzó las sanciones contra Corea del Norte, adoptando por unanimidad una resolución que Haley calificó cómo “el conjunto más severo de sanciones para cualquier país en una generación”.
Pero desde entonces, Corea del Norte llevó a cabo una de sus pruebas de misiles más provocativas en los últimos años, lanzando un misil balístico directamente sobre Japón, lo que llevó al gobierno de Tokio a advertir a los residentes en su camino para tomar la cubierta.
Advierte Rusia de ‘paso en falso’
Rusia criticó la reacción de Estados Unidos y sus aliados al más reciente y más poderoso ensayo nuclear de Corea del Norte y el lunes advirtió que cualquier paso en falso podría ser muy peligroso.
“Está claro que en la situación actual cualquier paso en falso podría llevar a una explosión, una explosión política, una explosión militar y no sólo a una explosión nuclear”, dijo a los periodistas el viceministro de Relaciones Exteriores ruso, Sergei Ryabkov, en una cumbre del grupo BRICS en China.
El ensayo norcoreano de lo que Pyongyang dijo que había sido una bomba avanzada de hidrógeno para un misil de largo alcance provocó la condena mundial y una advertencia de una respuesta militar “enorme” por parte de Estados Unidos si Washington o sus aliados son amenazados.
“No debería haber espacio para una escalada. Los que son más listos y fuertes deberían mostrar contención”, sostuvo Ryabkov.
Washington afirmó que podría responder a la nueva amenaza imponiendo nuevas sanciones a Corea del Norte.
El país está discutiendo sobre expandir la cooperación militar con Corea del Sur, que está desplegando el sistema de defensa antimisiles estadounidense THAAD, algo a lo que Rusia y China se oponen férreamente.
Ryabkov calificó el llamado de Washington a aplicar nuevas sanciones como desafortunado y dijo que ningún país tiene el derecho a adoptar acciones unilaterales.