Oposición no tiene nada qué negociar: Capriles

Reforma

Ciudad de México– Henrique Capriles, excandidato presidencial y gobernador de Miranda, aclaró que no rechaza conversar para solucionar la crisis de Venezuela.

"Si tengo que reunirme con el diablo, lo haría pero con testigos, con el Vaticano", aseguró el opositor según el diario El Nacional.

Capriles añadió, conforme al rotativo, que desconfía de los representantes del Gobierno, de la Unasur y en especial del expresidente español José Luis Rodríguez Zapatero, y por ello impone algunas condiciones.

Quiere la incorporación de otros expresidentes, como Felipe González, una agenda que incluya la restitución del orden constitucional, la libertad de los presos políticos, ayuda humanitaria y la convocatoria al revocatorio.

"La oposición no tiene nada qué negociar. El Gobierno llama a diálogo porque está con el agua al cuello y altos jerarcas compran casas y quieren negociar su salida.

"El diálogo no es para salvar a Maduro y su Gobierno. La oposición pide restituir la Constitución porque aquí hubo un golpe de Estado, al desconocer el derecho a elegir y asaltar el Parlamento. Cualquier posibilidad de un diálogo debe ser abierta, con presencia de medios de comunicación, reglas claras y una agenda", afirmó.

Además, invitó a la "Toma de Venezuela" que se realiza hoy y no descartó que la protesta pueda llegar a las puertas del Palacio de Miraflores, sede el Gobierno en Caracas.

El líder opositor informó vía Twitter que se encontrará con los manifestantes en la autopista Francisco Fajardo, en Caracas.

Desde temprano, miles de manifestantes se congregaron en avenidas, plazas y parques, en una protesta que busca generar presión para un cambio de Gobierno en medio de una crisis política y económica.

Una multitud de opositores ataviados con camisas blancas y banderas de Venezuela llegaba a las principales ciudades gritando contra el presidente Nicolás Maduro.

"Cada rincón del país debe llenar sus calles de un pueblo resuelto a restablecer el orden constitucional", dijo Roberto Enríquez, presidente del partido opositor Copei.

"Es evidente que Nicolás Maduro ha faltado a sus más elementales obligaciones constitucionales", agregó.

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