AFP
2016-10-18
Qayyarah, Irak– La base iraquí de Qayyarah, donde las ambulancias circulan a toda velocidad entre los vehículos blindados y el incesante vaivén de los soldados, se ha convertido en un centro logístico clave en la ofensiva para arrebatar Mosul a los yihadistas.
Las fuerzas iraquíes recuperaron en agosto la ciudad de Qayyarah, hasta entonces en manos del grupo Estado Islámico (EI), situada a unos 70 km al sur de Mosul, y que sirve ahora como base de retaguardia en la ofensiva lanzada el lunes.
A la base llegan los heridos y de ella parten las fuerzas que se dirigen al frente, en este batalla crucial para reconquistar la segunda ciudad del país.
Mientras llegan miembros de las fuerzas de seguridad heridos por un coche bomba, vehículos militares salen rápidamente para trasladar nuevas tropas al combate.
En un camión pintado de azul y negro, el camuflaje de la policía, el teniente Husam Ali Husein explica los motivos que lo llevan a luchar.
Además de querer ver la eliminación del grupo yihadista, esta batalla tiene para él un significado especial: es originario de una región que fue ocupada por los yihadistas en su ofensiva fulminante de junio 2014, que empezó con la toma de control de Mosul.
Hoy Ali dice que está "muy feliz por esta batalla". "Porque soy de esas zonas y, si Dios lo quiere, serán liberadas", dice.
Un poco más lejos, en la misma carretera, varios policías están esperando que les sirvan una ración de comida entre dos camionetas blancas, una que lleva la bandera iraquí, y la otra con una imagen del imán Husein, una figura venerada en el islam chiita.
De vez en cuando, el sonido de la artillería deja suponer que se están disparando obuses contra las posiciones del EI. Entretanto, los aviones de combate cruzan el cielo.
- Reputación en juego -
Dos helicópteros de ataque Apache sobrevuelan la base, donde también se encuentran fuerzas de la coalición antiyihadista liderada por Estados Unidos, que apoya a las fuerzas iraquíes.
En tierra, patrullan vehículos blindados. Uno de ellos lleva la bandera de Estados Unidos, en el otro, un soldado con una metralleta hace el gesto de la victoria.?
A lo lejos se pueden ver grandes columnas de humo que se elevan hacia el cielo desde pozos de petróleo incendiados. Todo el cielo está grisáceo.
Un soldado iraquí posicionado en uno de los puestos de control explicó que los yihadistas incendiaron los pozos petroleros para tratar de impedir a la coalición realizar ataques aéreos y retomar Qayyarah. Pero la ciudad cayó en manos de las fuerzas iraquíes el 25 de agosto y los incendios no han cesado desde entonces.
Después de que el EI tomara el control de Mosul en junio de 2014 con unos 1.500 combatientes, el grupo extremista consiguió apoderarse de vastas regiones del territorio iraquí.
Esta fulminante invasión puso en evidencia el fracaso completo de las fuerzas armadas iraquíes así como el entrenamiento que recibían por parte de Estados Unidos. Esta ofensiva para retomar el control de Mosul les permitiría recuperar su reputación.