Internacional

Grecia ya no aceptará más órdenes: Tsipras

AFP

2015-02-05

Atenas, Grecia ─ El Primer Ministro griego, Alexis Tsipras, arremetió contra sus aliados europeos, prometiendo poner fin a las políticas de austeridad de la Unión Europea.
En un desafiante primer discurso ante su grupo parlamentario tras regresar con las manos vacías de una gira europea, Tsipras dijo que Atenas ya no está dispuesta a aceptar más que le digan lo que tiene que hacer.
"Grecia ya no aceptará más órdenes, especialmente órdenes recibidas por correo electrónico", dijo.
"Grecia ya no será más el socio miserable que escucha las lecciones para hacer sus deberes. Grecia tiene su propia voz".
Por su parte, el Ministro alemán de Finanzas, Wolfgang Schäuble, dejó patente su desacuerdo con su homólogo griego Yanis Varoufakis, que puso fin a su gira europea sin ningún resultado para aclarar el horizonte de una Grecia al borde del precipicio.
"Todavía no estamos realmente de acuerdo en lo que tenemos que hacer ahora", reconoció Schäuble al término de una reunión con su par heleno.
"Pero estamos de acuerdo en que no estamos de acuerdo", añadió.
Schäuble pensaba tener por lo menos este punto en común con su homólogo griego, pero éste le corrigió.
"En mi opinión, ni siquiera nos pusimos de acuerdo sobre el hecho de no estar de acuerdo", dijo Varoufakis.
"Estamos de acuerdo en iniciar las deliberaciones, en tanto que socios", apostilló.
Pero eso, ante la situación financiera en la que se encuentra Grecia tras la decisión del BCE de poner fin al trato de favor que concedía a los bancos griegos que avalaban los créditos con deuda de dudosa calidad, es algo muy vago y lejano.
No obstante, según fuentes del BCE, éste podría conceder a los bancos griegos hasta 60 mil millones de euros de préstamos de carácter de emergencia mediante el programa ELA, para que el Estado heleno mantenga sus señales vitales con respiración asistida.
Este sistema ya mantuvo a flote los bancos helenos durante varios meses en 2012.
Señal política
Con esta generosa decisión, el BCE ha enviado una señal política a Atenas y garantiza que en las próximas semanas el sistema seguirá teniendo fondos.
"El BCE no quiere en absoluto asumir la responsabilidad de empujar a Grecia fuera del euro cortándole todos los grifos del crédito", explicó Dario Perkins, economista de Lombard Street Research.
En Berlín, Varoufakis aseguró que su Gobierno está haciendo todo lo posible para evitar un default del país.
En medio de todas estas señales, la Bolsa de Atenas perdió el 3.37 por ciento a 819.50 puntos, tras haber llegado a perder más del 9 por ciento.
Los bancos perdieron más del 10 por ciento, tras caídas del 20 por ciento durante la sesión, mientras que el rendimiento de la deuda superó el 10 por ciento.
"Grecia se va a acercar al precipicio antes de que surja una solución favorable", pronostican los analistas de Aurel BGC.
Sin chantajes
Schäuble, veterano político europeo y ardiente defensor de la ortodoxia presupuestaria, no escondió su escepticismo con las medidas anunciadas por el nuevo Gobierno griego de Alexis Tsipras, de la izquierda radical, que ha decidido poner fin a las privatizaciones y contratar a funcionarios despedidos, que en su opinión no van necesariamente en la buena dirección.
Antes de Berlín, Varoufakis había visitado Fráncfort, Roma, París y Londres mientras el primer ministro fue a Roma, Bruselas y también la capital francesa con el objetivo de convencer a los socios europeos a renegociar los 300 mil millones de la deuda griega (175 por ciento del PIB), de los que cerca de 200 mil los han proporcionado aquéllos, y poner fin a la austeridad en Grecia que socava el crecimiento.
Pero al final de esta cruzada, el balance no es muy prometedor.
Una quita de la deuda griega no está en discusión, recordó Schäuble en una conferencia conjunta con sus homólogo griego.
Por su parte, el Presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, no dijo ni media palabra al término de su encuentro con Tsipras el miércoles, y el Presidente francés, François Hollande insistió tanto sobre la solidaridad como sobre el respeto de los compromisos adquiridos.
El Fondo Monetario Internacional (FMI), importante acreedor del país, también ha dejado claro que no hay ninguna discusión con Atenas.
Schäuble instó a Grecia a seguir negociando con la troika de acreedores, (UE, BCE, FMI) de Grecia, lo que sin duda va a contrariar a las nuevas autoridades de Grecia que anunciaron que no los reconocían como interlocutores.
Sin duda, la fecha clave para Atenas puede ser la semana próxima, con motivo de la cumbre europea de Bruselas del 12 de febrero.
"Grecia no desea chantajear a nadie pero tampoco tiene intención de permitir que la chantajeen", aseguró una fuente gubernamental griega.

X