Internacional

Juntos, Irán y EU liberan ciudad sitiada por extremistas en Irak

The New York Times

2014-08-31

Bagdad— Entre los ataques aéreos estadounidenses, combatientes de la milicia chiíta aliados con Irán se enfrentaron a extremistas sunitas durante el fin de semana, atravesando sus defensas para poner fin al asedio de toda la semana contra Amerli, un grupo de aldeas agrarias cuyos habitantes chiítas enfrentaban la posibilidad de ser masacrados.
La lucha pareció tratarse de la primera ocasión en que aviones de guerra estadounidenses y milicias respaldadas por Irán trabajaron con un objetivo en común sobre un campo de batalla contra militantes del Estado Islámico, pese a que el gobierno de Obama indicó que no hay coordinación directa con las milicias.


Bagdad— Si tales actos militares continúan, podrían representar un cambio drástico para Estados Unidos e Irán, los cuales por mucho tiempo se han disputado el control de Irak. También podrían igualar los intereses de los norteamericanos con sus enemigos de tiempo atrás en las milicias chiítas, cuyos combatientes aniquilaron a muchos soldados estadounidenses durante la extensa ocupación de Irak.
La expansión más reciente de las operaciones militares de Estados Unidos refleja la medida en la que Irak se ha deteriorado desde el retiro de las fuerzas estadounidenses en 2011. Sin embargo, cualquier decisión de apoyar a las milicias chiítas, que han demostrado tener más experiencia que el ejército iraquí entrenado por Estados Unidos, implicaría sus propios retos.
Los militantes del Estado Islámico pudieron atacar Irak en meses recientes debido en parte a que los sunitas se sentían sumamente privados de sus derechos en el gobierno chiíta del ex primer ministro Nouri al-Maliki. Si Estados Unidos es visto apuntalando a las milicias que aterrorizaron a los sunitas durante la guerra sectaria de 2006 y 2007, los sunitas podrían resistirse a participar en el objetivo a largo plazo de Estados Unidos en cuanto a establecer un gobierno unitario.
O, en el peor de los casos, más sunitas podrían aliarse con combatientes del Estado Islámico.
David Petraeus, ex comandante militar estadounidense en Irak que encabezó el aumento de tropas estadounidenses en 2007, meses atrás advirtió contra tales posibilidades mientras el gobierno de Obama, que se estaba recuperando de la caída de la segunda ciudad más grande de Irak, Mosul, consideraba emprender acciones militares contra el Estado Islámico.
“Estados Unidos no puede ser la fuerza aérea de las milicias chiítas o un chiíta en una lucha contra los sunitas”, dijo durante una conferencia de seguridad en junio en Londres. “Debe ser una lucha de todo Irak contra los extremistas, quienes son árabes sunitas”.
Ayer domingo, Estados Unidos señaló que se encontraba trabajando en Amerli con sus aliados: unidades militares regulares y fuerzas de seguridad kurdas, a las que Estados Unidos ha estado apoyando por aire desde que el presidente Barack Obama autorizara tales ataques hace varias semanas.
“Nosotros no hicimos ningún tipo de coordinación con las milicias chiítas –tuvo que haber sido hecha por las ISF (Fuerzas de Seguridad Iraquíes)”, comentó ayer domingo un prominente funcionario del gobierno. (Tim Arango/Azam Ahmed/The New York Times)

X