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El Diario
Chihuahua— Un ataque en contra de agentes ministeriales arrojó un saldo de tres elementos heridos y desató una balacera de media hora en la colonia Las Granjas, al norte de la ciudad.
El enfrentamiento terminó con la detención de siete personas y el aseguramiento de armamento, equipo táctico y vehículos.
Todo comenzó en las calles Sicomoro y Pimentel, donde hombres armados a bordo de una motocicleta deportiva Yamaha atacaron a un par de agentes de la Fiscalía General del Estado, quienes afortunadamente sólo resultaron con heridas leves.
Los oficiales respondieron al ataque, obligando a los sicarios a huir sobre la calle Sicomoro y tomar la calle José Velázquez de León, para luego introducirse a un domicilio ubicado frente a una alberca pública.
Ya ubicados los presuntos responsables, los agentes heridos solicitaron por radio el apoyo de sus compañeros y en cuestión de minutos elementos de la Fiscalía General del Estado, de la Comisión Estatal de Seguridad, de la Policía Vial y de la Policía Municipal, sitiaron la vivienda.
Desde el interior los presuntos sicarios disparaban en contra de la autoridad y los agentes respondían al ataque, balacera que se prolongó por más de media hora; fue en el transcurso del tiroteo que otro agente de la Fiscalía General resultó herido en el rostro, quien una vez que fue atendido por paramédicos de la Policía Municipal, regresó al combate.
Varios negocios cerraron sus puertas aún con la clientela en el interior para resguardarse, y al menos diez viviendas aledañas a la casa de seguridad donde se encontraban los sicarios fueron desalojadas, además de una estancia infantil y una alberca pública, en las cuales había al menos 15 menores de edad y algunas madres de familia.
Mientras las ráfagas de armas largas y cortas sembraron el pánico entre los moradores del sector, algunos padres de familia indicaron que tomaron a sus hijos y corrieron a ocultarse en la última pieza de su vivienda para evitar ser lesionados por una bala perdida.
Otro morador de la zona, sobre la calle Velázquez de León, dijo que tomó a su esposa y tres hijos y los metió a la tina de baño cubriéndose con uno de los colchones de la cama, ya que las ráfagas de armas de fuego se escuchaban penetrar en su finca.
Madres de familia de la estancia infantil Cool Brain, ubicada sobre la misma Velázquez de León y Acacias, indicaron que llevaron a los siete menores y tres amas de casa al último salón de clases y luego de tirarse al piso, guardaron silencio mientras que al menos dos de ellas presentaron crisis nerviosas.
Luego de la intensa balacera que movilizó a decenas de agentes de todas las corporaciones, elementos de los grupos especiales de la CES y de la Policía Municipal irrumpieron en la finca logrando la detención de siete personas, dos mujeres y cinco varones, a quienes inmediatamente trasladaron al complejo estatal de seguridad C-4 para iniciar con su investigación.
En la zona del ataque quedaron regados decenas de casquillos percutidos de distintos calibres, mientras que en la vivienda se aseguró un fuerte armamento, casquillos, equipo táctico y al menos dos vehículos, entre ellos la motocicleta en la que viajaban los dos sicarios que atentaron en contra de los dos agentes y que a la postre desató el enfrentamiento.
Tras los acontecimientos violentos, el fiscal César Augusto Peniche Espejel confirmó el hecho e informó de los tres agentes heridos, quienes están fuera de peligro, toda vez que sólo recibieron heridas por esquirlas de bala.
Asimismo, tres ambulancias, dos de Urge y una de Cruz Roja arribaron al lugar para brindar los primeros auxilios a los lesionados y se quedaron en un lugar cercano para atender a otros lesionados en caso de así necesitarlo.
Ya entrada la noche ninguno de los jefes de las corporaciones policiacas que participaron en el enfrentamiento se habían pronunciado en torno al caso.