De la Redacción/
El Diario
Chihuahua— Desesperados por obtener justicia, familiares de las víctimas de la tragedia del Festival Extremo Aeroshow, que enlutó a Chihuahua el 5 de octubre del 2013 en la presa El Rejón, exigen solución a su situación.
Cinco familias representadas por el abogado Juan Felipe Ponce Morones exigen respuesta por parte de las autoridades.
Un ejemplo son los parientes del señor Salvador Rafael Chávez de la Vega, quien desde el 27 de febrero del año en curso se entrevistó en persona con la presidenta municipal, María Eugenia Campos Galván, para tratar su expediente.
En la citada entrevista al pie del Palacio Municipal, Campos Galván prometió a Salvador Rafael Chávez hacerse cargo del caso y giró instrucciones para que se le atendiera. Sin embargo, después de casi tres meses de incontables juntas y reuniones para llegar a un convenio, Salvador siente que todo fueron palabras y promesas vacías.
Lo anterior a pesar de que en la Subdirección Jurídica del Ayuntamiento le presentaron un convenio para poner fin al caso, mismo que tanto él como su esposa aceptaron y firmaron el 23 de marzo; sin embargo, el convenio nunca fue firmado por las autoridades municipales, quienes, dice Chávez, nada más los trajeron a vuelta y vuelta.
Chávez reclama que al final ni le dieron su convenio, ni su sentencia, y por el contrario, lo único que hicieron las autoridades fue revictimizarlo al tener que revivir a él y a toda su familia, la pesadilla que vivió para sacar a sus hijos pequeños de debajo de la troca monstruo que los embestió.