El Diario de Chihuahua
2018-05-04Chihuahua— Tres procesos más se abrieron contra Héctor Alonso B. Ch., dueño de una estética, señalado como presunto agresor sexual, quien al parecer usó sustancias químicas para que sus víctimas perdieran el conocimiento.
Como parte del seguimiento a las investigaciones iniciadas, la Fiscalía Especializada de la Mujer aportó suficientes elementos de prueba para iniciar los tres procesos más como probable responsable de un caso de abuso sexual y dos más de violación.
Las pruebas presentadas, señalan que en el mes de noviembre de 2017, el imputado le colocó a una adolescente de 17 años de edad que trabajaba en su estética, una toalla en la cara con sustancia que la hizo desvanecerse y que le realizó tocamientos antes de quedar inconsciente.
La tercera carpeta de investigación, establece que la víctima de 16 años trabajaba para Héctor Alonso en el negocio ubicado en la calle 25 de la colonia Santo Niño y que el 6 de diciembre le colocó un algodón en la nariz con una sustancia que la hizo perder el conocimiento.
El cuarto hecho que se le imputó, señala que en el mes de octubre del 2017 el procesado le dio a beber una sustancia a la afectada de 17 años de edad que la hizo desmayarse.
De acuerdo con las indagatorias realizadas hasta el momento, se estableció que el en los últimos dos casos el imputado violó a las dos víctimas menores de edad mientras se encontraban imposibilitadas para defenderse.
Las investigaciones ministeriales, determinaron que el procesado ofrecía trabajo a las víctimas por medio de Facebook y que posteriormente les prometía enseñarles a hacer masajes reductivos para que ganaran mas dinero, valiéndose de esto para usar toallas con químicos que las hacían perder el conocimiento.
El imputado fue detenido y vinculado a proceso el pasado mes de marzo como probable responsable de violar a otra mujer de 20 años con el mismo modus operandi.
La Fiscalía Especializada de la Mujer hace un llamado a las personas que lo identifiquen como su agresor para que acudan a interponer su denuncia ante el Ministerio Público, en las oficinas ubicadas en la calle 51 y Rosales de la Colonia Popular, en esta capital.