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El Diario
Desde el pasado 26 de marzo, el hoy candidato del Partido Revolucionario Institucional a la alcaldía de Chínipas, Salomé Ramos Salmón, solicitó tanto a la Procuraduría General de la República como a la Fiscalía General del Estado informarle si tenían alguna investigación en su contra.
“En ejercicio de mi derecho de petición consagrado en el artículo 8 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, vengo a solicitar se me informe lo siguiente: si existe alguna investigación o se halla abierta una carpeta en la cual el suscrito aparezca como investigado, indiciado, inculpado o imputado por la comisión de algún delito en cualquier modalidad de participación, ya sea de competencia del fuero común o federal”, preguntó el priísta en escritos entregados a ambas dependencias.
Días antes, los medios habían difundido su parentesco con Jesús Alfredo Salazar Ramírez, casado en 1997 con la hermana del aspirante priista y detenido por el gobierno mexicano como “uno de los principales” operadores del Cártel de Sinaloa entre Chihuahua y Sonora.
Hasta ayer las autoridades ministeriales no habían respondido al aspirante priista y su partido lo registró como su representante en esa comunidad.
Ninguna de las dos instancias del ministerio público respondieron a El Diario sobre alguna investigación contra el priista.
De acuerdo con la Secretaría de la Defensa Nacional, Salazar Ramírez era encargado del “control de siembra, producción y tráfico de droga en el estado de Sonora y parte serrana del estado de Chihuahua; la enviaba principalmente hacia los Estados Unidos”.
Ramos Salmón es la segunda persona vinculada con Salazar Ramírez que el PRI busca colocar en la alcaldía de esa comunidad serrana, ya que en 2016 lo mismo trató con Juan Salazar Ochoa, primo del citado presunto integrante de la delincuencia organizada.