Itzel Ramírez/
El Diario de Juárez
De concretarse la salida de Lilia Merodio y Graciela Ortiz del Senado de la República, el estado de Chihuahua podría quedarse sin representatividad en el Senado, advirtió Khemvirg Puente, académico de la UNAM y experto en parlamentarismo.
El investigador dijo que si ambas legisladoras piden licencia de sus escaños, al igual que sus suplentes que también aspiran a cargos de elección popular en los próximos comicios, el escenario significa un riesgo para la representación estatal.
“Habría un vacío de representación parlamentaria de los ciudadanos del estado de Chihuahua y de los intereses del Estado en la cámara que representa el pacto federal. Eso sería muy lamentable porque justamente ahora se debaten cosas que son muy importantes para el destino de Chihuahua como el presupuesto mismo, como las transferencias gubernamentales y se requiere de una voz que represente a la entidad federativa”, comentó.
Puente, actualmente presidente de la Comisión Bicamaral del Canal del Congreso, dijo que aunque en el próximo período ordinario de sesiones no se contemplan grandes reformas, sí será un escenario importante de discusión política. Por ello, reiteró, es importante que permanezcan cubiertos esos espacios.
“No es lo deseable en mi opinión que estén dedicados a dos actividades distintas, pero está previsto legalmente, no es deseable que esté vacante una posición en el Senado de la República porque entonces quién estaría representando al estado de Chihuahua. Por eso se prevé es que se regresen a sus escaños al período legislativo”, explicó.
El riesgo en la pérdida de escaños existe porque las suplentes de ambas senadoras, las actualmente diputadas Georgina Zapata y Adriana Terrazas, son también aspirantes a cargos de elección popular, por lo que podrían optar por pedir licencia y dedicarse de lleno a sus respectivas campañas.
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