El Diario de Chihuahua
2017-11-21
Chihuahua— Daños cuantiosos sufrió el auditorio del Centro de Justicia por la ruptura de una tubería de dos pulgadas de agua a presión en el techo, misma que se produjo durante la madrugada de ayer y se extendió al área de estacionamiento en los sótanos uno y dos, inmovilizando el área de elevadores de la Torre Sur.
La fuga del líquido fue detectada alrededor de las 05:30 horas por personal de seguridad del edificio, quienes narraron a El Diario haber escuchado un fuerte estruendo por la caída del falso plafón derivado por el peso del agua.
Entre los daños estuvieron equipos de proyección, bocinas, líneas de conducción de voz y datos así como las propias redes de agua contra incendio, maquinas y climatización del auditorio que se desplomaron.
Más de 100 butacas así como la alfombra del recinto comenzaron a ser retirados por el personal de mantenimiento del edificio, quienes hasta antes del cierre de esta edición no tenían una cuantificación de los daños.
“No sabemos exactamente qué paso porque el peso del techo derribó otras líneas de la red de maquinas, contra incendios y de clima”, dijeron los trabajadores entrevistados en el lugar.
El departamento de Comunicación Social, a través del titular Óscar Hernández informó que la fuga se produjo por un codo de “mala calidad” que une a la línea de agua de dos pulgadas que tiene una presión de 156 libras de descarga.
La filtración llegó hasta la planta baja y el área de estacionamiento de los sótanos uno y dos, en el lado de la Torre Sur, donde los elevadores de ese sector fueron inhabilitados para los empleados y visitantes, así como el suministro de electricidad interrumpido, para que se llevarán a cabo las labores de limpieza sin riesgos.
Desde la mañana de ayer al personal que labora en el Poder Judicial se le impidió por seguridad ingresar por el sotano al área de estacionamiento sur, por lo que fueron conducidos al módulo norte.
Decenas de trabajadores con la ayuda de escobas y equipos para limpiar se dieron a la tarea de conducir el agua a las alcantarillas de la parte baja del edificio.
Hasta el mediodía en los sótanos continuaban los escurrimientos ya que se logró acumular un gran volumen de agua en la parte baja del auditorio, toda vez que el sistema de inyección cuando sufrió la fractura, continuó bombeando agua a la red.
No fue sino hasta pasadas las seis de la mañana cuando el personal de mantenimiento llegó y cerraron todas las válvulas de ese sector así como la interrupción de la electricidad.