Orlando Chávez/
El Diario
Chihuahua— “La gente tiene miedo, está temerosa por los hechos recientes”, dijo la empresaria Olga Vega en el encuentro de habitantes de Madera con el gabinete estatal, encabezado por el gobernador Javier Corral.
Vega reclamó al Gobierno del Estado las condiciones de inseguridad que existen en la región, que amenazan la actividad económica y social de todos sus habitantes.
A esta demanda se sumó el alcalde de Madera, Jaime Torres, quien dijo al mandatario que hay que reconocer que Madera pasa por una situación muy compleja, por lo que se tienen que tomar acciones y que “no se puede tapar el sol con un dedo”.
Representantes de la comunidad aprovecharon la visita para decir a los integrantes de la administración estatal que si bien hay avances en ciertos temas, la inseguridad y violencia son constantes que afecta todo lo demás. Recalcaron que les preocupa el futuro de Madera, ya que los criminales operan en la región y hasta el momento no se ha logrado recuperar las condiciones de tranquilidad y seguridad. Apuntaron que la región es productiva, pero se requiere un impulso de las autoridades para potencializarla.
Una de las quejas vino de una joven recién egresada de preparatoria, que narró cómo varios de sus compañeros se han tenido que ir del municipio, expulsados por el actuar de los criminales que se apoderan de las actividades productivas e inyectan miedo entre los habitantes.
Expuso que su deseo es seguir preparándose en Madera y ser una profesionista que aporte a su comunidad, pero para eso se tienen que tener las condiciones de seguridad, ya que de lo contrario no habrá progreso.
Luis Gutiérrez, de Madera Unidos, mencionó que es lamentable que en esta reunión no se aborden los temas de seguridad con más decisión; dijo que mientras se aplauden obra que aún no se hacen, los habitantes no se pueden desplazar libremente por el municipio, y puso como ejemplo las instalaciones de la mina cercana, a la cual no se puede llegar sin la autorización de personas que se dicen integrantes del crimen organizado.
La región de Madera ha sido escenario en cuestión de un mes de dos ataques de grupos criminales, en uno de los casos asesinaron a dos agentes de la Policía Estatal, mientras que dos semanas después en un enfrentamiento entre grupos antagónicos hubo por lo menos 15 víctimas mortales, así como lesionados, lo que generó el miedo entre los habitantes.
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