Manuel Quezada/
El Diario
Chihuahua— El crimen organizado “gobierna” en diversas regiones del país, entre ellas, algunas zonas en Chihuahua, donde la autoridad democrática no entra, dijo ayer el expresidente nacional de Coparmex, Gerardo Aranda Orozco.
Durante una rueda de prensa acompañado del presidente de Coparmex-Chihuahua, Federico Baeza Mares, al hablar de los escenarios probables en el marco del cambio de administración presidencial, expresó que se tiene el riesgo de que se consolide un “gobierno paralelo” con el objetivo de control territorial y de extorsiones.
Precisó que este caso de caída del sistema democrático es poco probable de que suceda, aunque señaló que actualmente en la mitad de Guerrero se “gobierna” por gente no electa democráticamente, también en zonas de Chiapas, Tamaulipas y Chihuahua.
“Si eso se generaliza habría un colapso del Estado y estaría el país en manos de un gobierno paralelo que no tendría intereses por la educación, seguridad, ni nada, sino exclusivamente el control del territorio, extorsión y derecho de piso, entre otros”, expresó.
Aranda criticó el hecho de que hace unos cuantos años se esclarecía el 50 por ciento de los homicidios, pero ahora no llega ni al 15 por ciento en México, ya que hay una tendencia a acreditarlos al crimen organizado.
Sin embargo, dijo que la sociedad requiere que la autoridad cumpla con su deber y le dejen claro si en realidad la gente fue asesinada por su actividad ilícita y cuál fue el grupo delictivo que lo hizo.
Agregó que se puede continuar en regresión, donde los avances democráticos son vulnerados por gente que quisieran volver al pasado y buscar en viejas fórmulas la solución a nuevos problemas.
Dijo que le angustia pensar que se pueda regresar al populismo de Luis Echeverría o José López Portillo.
El último escenario sería el ver cómo dar un mayor avance democrático al país, lo que no se ha discutido mucho y se requiere ya que sólo así se puede resolver muchos problemas del país.
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