Fernando Aguilar/
El Diario
Luego de que llegó al almacén de los Servicios Estatales de salud, la insulina comenzó a arribar a los centros de salud “a cuentagotas” para ser distribuida a los derechohabientes del Seguro Popular.
El Diario se comunicó ayer a cuatro de estos centros para conocer si contaban con el insumo, pero en algunos éste todavía no llegaba y en otros se encontraba en poca o nula cantidad.
En el centro de salud “B”, ubicado en la colonia Bellavista, sobre la avenida Vicente Guerrero, personal informó que el fármaco Glarcina, principal faltante, ya estaba disponible, aunque no podía garantizarse el abasto porque en el caso de esa unidad la demanda era considerable.
En el centro comunitario San Felipe, situado entre las calles Baro y Mina, empleados reportaron inexistencia del medicamento, mientras que en el de la colonia División del Norte sólo una unidad estaba disponible.
En el centro de salud Galeana, que se encuentra entre las calles Mexcala y Tlalpa, los trabajadores indicaron que contaban con abasto suficiente.
En días pasados, el titular de la Secretaría de Salud del Estado, Ernesto Ávila Valdez, informó que el retraso en la distribución de este medicamento se debió a que los proveedores no lo habían surtido a tiempo pese a que debieron hacerlo desde enero.
De acuerdo con Arturo Valenzuela Zorrilla, director médico de esa dependencia en la Zona Norte, la falta de la insulina se agudizó en el Hospital Infantil de Especialidades (Hies).
La insulina es una enzima que, según los médicos, supone gran importancia en el organismo porque tiene varias funciones, entre ellas permitir que las células del hígado se surtan de glucógeno para guardarlo.