El Diario
2017-02-20Chihuahua— Por lo menos una decena de policías preventivos del municipio de Madera renunciaron y se dieron de baja ayer de la institución, al haber asumido la Policía Estatal Única (PEU) el control de la Comandancia de Policía de aquella zona.
Fue alrededor de las 8 de la mañana cuando el alcalde de Madera, Jaime Torres Amaya, entregó a la Fiscalía General del Estado (FGE) las instalaciones de Seguridad Pública y en donde los policías municipales inconformes con la llegada de éstos ya no se presentaron a trabajar, confirmaron fuentes de la FGE y de la propia comandancia policiaca.
“Hubo varios compañeros que ya no se presentaron hoy por la mañana (ayer), porque se dieron de baja”, dijeron policías preventivos de Madera.
Carlos Huerta Muñoz, vocero de la FGE, informó que hasta el mediodía de ayer habían sido entregadas y recibidas sin incidentes las instalaciones de las policías preventivas de Nuevo Casas Grandes y Gómez Farías.
“Se hizo de manera normal y en base al programa esperado, por lo que se está a la espera de que lleguen los agentes aquí (Chihuahua) para las evaluaciones correspondientes”, dijo Huerta.
El titular de la PEU, Óscar Alberto Aparicio Avendaño, informó el pasado fin de semana que los policías municipales de la zona serrana serán acuartelados tres meses para capacitarlos como parte de las disposiciones del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP).
Con respecto a la aplicación de los exámenes de control y confianza, añadió que aquellos que reprueben ya no serán admitidos como policías municipales o estatales.
Por su parte, el fiscal general César Augusto Peniche dijo que el principal problema en estos momentos es la grave inseguridad que priva en la Sierra de Chihuahua.
Con respecto a las corporaciones encargadas de la seguridad de la población, comentó que “los propios municipios son extorsionados por el crimen organizado, las policías municipales están totalmente intervenidas, es decir, cooptadas por la delincuencia organizada, entonces, eso es algo que ya no puede seguir”.
El funcionario estatal calificó la situación actual como algo preocupante y de emergencia, por lo que a raíz de ello, se envió a un contingente de 300 policías estatales para enfrentar la inseguridad en la zona y a los grupos criminales.
Con respecto al número de policías preventivos que renunciaron en el municipio de Madera, se informó extraoficialmente en la FGE que fueron por los menos 10 agentes los que ya no se presentaron a laborar, y se detalló que esta cantidad podría incrementarse en otros municipios donde la PEU comenzó a tomar el control de las instalaciones y cuyos agentes realizarán las funciones de vigilancia y patrullajes.
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