Fallece bebé por supuesta negligencia en el IMSS de Parral

El Diario de Parral

Hidalgo del Parral─ Una bebé que llegó con problemas de respiración al área de urgencias del IMSS de Parral, duró aproximadamente 2 horas sin recibir atención médica y murió.

Los médicos señalan que hicieron lo posible por salvarla, sin embargo no lo lograron.
Con lágrimas y la voz quebrantada tras la pérdida de su niña de tan sólo un año y dos meses, los padres de Tania Gisel López García piden se haga justicia para su familia, ya que por una negligencia cometida por los médicos y enfermeros de Urgencias, su bebé murió esperando ser atendida.
El hecho ocurrió durante la noche del viernes pasado; la pequeña traía gripa y flemas, por lo que la cuidaron y llevaron a una farmacia similar, ahí dijeron que tenía una infección en la garganta y le dieron medicamento esa noche. Horas más tarde detectaron que a la niña le dolía su garganta, le pusieron miel en sus encías y se quedó dormida hasta las 3 de la mañana del sábado.

Al transcurso de unas horas, empeoró pues respiraba con dificultad, por lo que de inmediato fue llevada por sus padres al nosocomio.
"Nos fuimos rápido al hospital, llegamos como a las 6 de la mañana, pero desde que llegamos, la secretaria nos trató mal, llenó la solicitud pero no pasaban a mi niña a la sala de Urgencias, no había nadie, ya después un enfermero dijo que se sentara antes de entrar a pediatría, la niña continuaba mal porque no podía respirar, estaba muy inquieta", detalló Adriana González, madre de la pequeña. "Fue cuando llegó el doctor y la enfermera, a lo que el médico dijo que luego la atendía y se fue, –no los recibió para atenderla–.
Después de eso, la niña estaba en una condición más grave y luego de 10 minutos, una doctora le dijo que pasara para revisarla, le preguntó que si de cuáles medicamentos estaba tomando la niña, para esto la madre de Tania le señaló cuáles eran las medicinas, pero no las recordó todas, por lo que la doctora se molestó y a pesar de ver a la pequeña enferma no la atendía.
Posteriormente, le indicó que fuera al área de rayos X (con un tono de molestia le explicó dónde era) por lo que de inmediato se fue corriendo para que atendieran a la bebé, ya en el lugar estuvo mucho en espera para que salieran los estudios, después de esto le indicaron que fuera a pediatría y, ya con más dificultad para respirar, de inmediato la niña fue llevada hasta donde se le señaló a la madre.
El doctor le puso unas nebulizaciones, pero aún así no podía respirar, luego acudió una enfermera y le puso una inyección con un líquido blanco, le pidió que le ayudara a darle la vuelta a la niña, pero ésta ya no podía sostenerse –estaba desvanecida tras el malestar y no poder respirar–, por lo que al querer aplicar la jeringa, la niña no hizo reacción de ningún tipo, a lo que la enfermera dijo “si está malita mire, ni siquiera se mueve”.
Luego le puso otra inyección debido a que la aguja estaba tapada, la enfermera cambió la aguja hasta que pudo ponérsela, después se retiró y parecía que fue un cambio de turno porque ya no volvió la misma enfermera, explicó Adriana García, la nueva enfermera preguntó que si ya se le estaba terminando la nebulización y le dijo que sí, que ya pronto se acababa, luego se fue y se quedaron solos en el área de pediatría junto con otra pareja que se encontraba al fondo acompañando a su hijo.
“Ni los doctores ni los enfermeros le pusieron oxígeno a mi niña, que es lo que ella necesitaba, ya después de eso yo sentía que mi hija ya no respiraba, yo le quería dar respiración, no podía llevarla con otro doctor porque pensaba que no iba a poder respirar, yo le daba el oxígeno con mi boca, luego de eso dio un respiro profundo, se levantó y dijo maaamaaa, se levantó, me tomó de la mano y volteó a verme, fue ahí cuando murió”, explicó llorando y con importencia la madre de la pequeña Tania.
"De inmediato pedí ayuda a los doctores, corrí con ella en mis brazos y les dije que ya no respiraba, que ya estaba muerta, fue ahí cuando ahora sí llegaron muchos doctores y enfermeras, pero ya era demasiado tarde, la metieron a emergencias y comenzaron a trabajar, sin embargo no pudieron hacer nada, luego salió el doctor y me dijo que hicieron todo lo que pudieron pero no lograron salvarla", indicó.
“Ella tenía que haber sido atendida desde que llegamos al área de Urgencias, pero pasaron dos horas, ya era demasiado tarde, mi niña murió por la negligencia de personal del IMSS, nadie estaba ahí, nadie me ayudó, yo quería estar con mi niña, me veía como si estuviera feliz porque estaba conmigo, antes de morir me vio y me sonrió, yo que se su sonrisa fue porque vio a Jesús, ahora ella está allá en el cielo”, finalizó.

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