Patricia Mayorga/
El Diario
Chihuahua— El comandante Javier Benavides González, director provisional de la Policía Estatal Única negó tener vínculos con el narcotráfico y aseguró que en el 2000, cuando se le acusó de proteger a narcos, las autoridades lo declararon inocente.
“Tengo familia, me preocupa que lleguen a pensar que, por publicaciones a la ligera, su abuelo tiene involucramiento, no hay ninguna denuncia en mi contra”, insistió.
En una conferencia de prensa que convocó el mismo jefe policiaco en un restaurante del Centro Histórico de esta ciudad, indicó que “yo sigo al frente de la Policía Estatal Única, mi conciencia está tranquila, no he visto al señor (Antonio) Pinedo, fue un juez quien los metió a la cárcel, yo no estaba ya como jefe de la Policía”.
En el lugar, al que llegó con recortes de publicaciones de periódicos de hace 15 años, señaló que “Víctor Anchondo, entonces secretario general de Gobierno, me pidió que retirara las acusaciones y acepté por la presión de la prensa”.
“Las acusaciones en mi contra están basadas en gente con antecedentes penales y dichos falsos sin fundamento”, sentenció.
Dijo que sólo lo acusó Martín de Arce Botello, quien era agente de la Policía Municipal de Juárez y quien fue dado de baja, así como una hermana del exagente de la Policía Estatal, Javier Lardizábal, alias “El Negro”.
Confirmó que en notas periodísticas fue acusado de esos delitos, pero insistió en que las autoridades lo declararon inocente.
Benavides se asumió como responsable de la Policía Estatal, aunque las autoridades han enfatizado que su nombramiento es provisional porque fue el encargado de recibir la corporación.
“Para mí es también esencial a nivel personal, velar por mi nombre, por mi honor y el de mi familia, por lo que responder a las aseveraciones que han hecho sobre mi persona, es absolutamente indispensable”, explicó.
Explicó que en distintas publicaciones se ha sugerido que tuve o tengo vínculos con el crimen organizado, “éstas están basadas en artículos publicados en el año 2000 por la revista Semanario”.
Benavides refirió que él era comisionado de Seguridad en Ciudad Juárez, cargo que ocupó de 1998 a 2000 y en ese lapso dio de baja a De Arce Botello, porque contaba con 13 reportes por robo, lesiones, abuso de autoridad, allanamiento de morada, daños y hostigamiento entre 1993 y 1999.
Sostuvo que De Arce fue posteriormente aprehendido por las autoridades en varias ocasiones por tráfico y posesión de drogas y mostró notas periodísticas al respecto.
Sobre Lardizábal, oficial en cuya desaparición y homicidio involucran también a Benavides, explicó que se basaron en declaraciones de la hermana de ese agente, quien dijo que la última persona que lo vio con vida fue Benavides, pero posteriormente señalaron a otra persona. (Con información de Heriberto Barrienos / El Diario)
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