El Universal
2015-05-19
Distrito Federal— Jorge Enrique González, fiscal General de Chihuahua, informó que los cinco menores involucrados en el homicidio de un niño de seis años, dijeron que decidieron matar al pequeño para evitarse un problema porque lo habían lesionado, porque "se les había pasado la mano".En entrevista con la periodista Adela Micha, el funcionario agregó que los menores, especialmente tres de ellos, tienen antecedentes no penales por causar algunos problemas en su colonia, como romper vidrios y provocar daños materiales.
El fiscal también comentó que el adolescente de 15 años, quien lideraba al grupo, es un "joven rebelde, con problemas en la escuela, lo acababan de correr de una secundaria por indisciplina, por mala conducta".
Abundó que con anterioridad, los menores “se burlaban del niño, le hacían bromas y lo llegaban a lastimar”.
Sobre el día de los hechos, narró que se llevaron al pequeño Cristopher Márquez con engaños, le dijeron que iban a jugar a que lo secuestraban. Lo amarraron y lo llevaron a un terreno, donde decidieron empezar a torturarlo como si realmente fuera una persona plagiada.
Sin embargo, al ver que ya lo habían lesionado severamente, decidieron quitarle la vida para evitarse el problema por haberlo herido. Después decidieron enterrarlo en una fosa y "trataron de cubrir la situación como si no hubiera pasado nada"; pensaron que pasaría como un secuestro, refirió el fiscal.
El funcionario estatal refirió que ese es el móvil y que no hay nada más de fondo, que se trató de un tema que empezó como un juego, en la continuidad del maltrato que le daban, y que culminó en el terrible hecho como una forma de cubrir la agresión que le habían provocado.
Añadió que en un principio la actitud de los implicados, sobre todo el de 15 años, fue de decir "se nos pasó la mano", que era una cuestión de juego, pero que hoy ya están muy preocupados.
Descomposición social
González señaló que no hay antecedentes de un caso similar en el estado y que es algo que muestra un tema de descomposición social, por lo cual no sólo debe ser visto como un tema únicamente policial, sino que debe llamar a la reflexión.
El fiscal general del estado dijo que es momento de hacer un alto en el camino para hacer una gran convocatoria social para evitar que se repitan casos como este.
"Me parece que aquí tenemos que ver por qué llegamos a estos extremos, por qué ocurre esto, qué fue lo que como sociedad hemos omitido o hemos hecho que nos permite llegar a un extremo de estos".
También señaló que prácticamente las averiguaciones previas por el caso están agotadas, ya que las personas ligadas están bajo custodia, pero insistió en que el hecho debe ir más allá.
En términos legales, dijo que se procederá penalmente en contra del joven de 15 años y que los otros son inimputables, aunque se pedirá que se retire la custodia a los padres y que sean internados en un albergue, “en el que se tendrá mucho cuidado de que no haya un problema adicional”.