Redacción
El Diario de Chihuahua
Chihuahua– Después de permanecer escondidos por más de una semana para evitar ser agredidos por los integrantes de grupos armados, ocho hombres lograron salir ayer en la mañana de la comunidad de Tubares, municipio de Urique y se refugiaron en el estado de Sinaloa, ante la negativa de las autoridades de Chihuahua para brindarles ayuda y reunirse con sus familias, en esta ciudad.
Uno de los desplazados comentó que un grupo de soldados que recientemente llegó a Tubares fue quien los apoyó para salir wde esa intrincada comunidad, por lo que fue necesario solicitar taxis aéreos del vecino estado.
El entrevistado comentó que los soldados estuvieron dando seguridad en la zona para que las aeronaves pudieran aterrizar y despegar sin ningún problema, con la finalidad de evitar que ocurriera un atentado contra las aeronaves, como sucedió el lunes de la semana pasada, cuando un avión tipo Cessna 206 se desplomó, falleciendo sus seis ocupantes.
El quejoso comentó que ni siquiera se enteraron que este lunes fue a Tubares el fiscal general del estado, Jorge González Nicolás.
Dijo el desplazado, que los únicos que se acercaron a ellos fueron agentes de la Policía Ministerial; “nos decían que les entregáramos las armas para podernos ayudar, pero cuáles armas, les dijimos que nosotros no tenemos armas y no nos quisieron ayudar”.
Un grupo considerable de agentes de la Policía Ministerial fue enviado hace unas semanas al municipio de Urique, ante los reportes de pobladores que aseguran que cientos de hombres armados, incluyendo niños de entre 8 y 10 años, se encontraban en varias comunidades haciendo desmanes e incendiando viviendas.
“Hace varias semanas que estamos pidiendo apoyo a las autoridades, sobre todo al Ejército, ya fueron a Parral, a la zona militar, pero no nos hacen caso”, dijo una vecina de la comunidad.