El Diario de Chihuahua
2015-04-30
Chihuahua─ Cristian Orlando Ruiz Salcido de 15 años padece una de las enfermedades menos comunes: “colangitis esclerosante primaria”, la cual afecta su hígado y las vías biliares de manera crónica y lo ha mantenido durante meses en el hospital.
El adolescente sólo cuenta con la compañía de su madre, quien sola, pasa días y noches enteras a su lado.
Ambos son de la etnia tarahumara, originarios de Sisogichi, municipio de Bocoyna, sin conocer a nadie, sin tener sustento económico estable ni nadie en quién apoyarse ni económica ni moralmente.
Ellos viajan hasta la capital en busca de atención médica que en esta ocasión se ha prolongado por meses.
Cristian permanece internado en el Hospital Infantil, su madre sólo se retira del costado de su cama para ir a comer, quien comenta tienen todo tipo de necesidades, pues no tiene papá y sus otros dos hermanos dependen 100 por ciento de su madre, que sólo trabaja por temporadas como jornalera en la pisca de manzana “ahora dejó de trabajar para venir a cuidarme y mis otros hermanos se quedaron con mi abuela”, cuenta el menor enfermo.
Al cuestionarlo sobre las necesidades de su familia, expresa “unos huaraches para mi mamá, qué tiene que tengan taconcito, ropa para mí y para mis hermanos, zapatos, dinero para los camiones para regresarnos o para venir cuando nos toca”, señala, pues la inestabilidad económica les orilla a pedir prestado cuando tienen que venir a Chihuahua.
Este adolescente poco entiende de su enfermedad, con un aspecto alegre a pesar de su estado, piel y ojos de un impresionante color amarillo, dice que le han dicho que dependerá de un trasplante para curarse, hay días que padece de un fuerte dolor abdominal y dice ya haberse acostumbrado a las agujas y todo tipo de instrumentos “con tal de aliviarme me aguanto cualquier cosa”, comentó.
La pediatra Vanesa Esparza, uno de los médicos que atiende a Cristian, comenta que la enfermedad del niño es de las menos comunes y, de no responder al tratamiento, tendrá que pasar a una lista de espera como candidato a recibir un trasplante, procedimiento quirúrgico que depende de que alguien muera en circunstancias específicas y sea compatible con Cristian.
Aunque el niño está siendo atendido, la doctora Esparza coincide en que Cristian es de una familia indígena de muy bajos recursos y tienen todo tipo de necesidades.
A pesar de que se les proporciona atención médica gratuita, albergue y comidas, Cristian tiene más hermanos que dependen económicamente de la misma mujer que ahora ocupa 100 por ciento de su tiempo en el hospital, sin poder proveer de lo necesario a sus otros dos hijos.
Si alguien desea ayudarlos, pueden acudir al hospital infantil y hablar con Cristian Orlando Ruiz y su madre.