Heriberto Barrientos Márquez
El Diario
Chihuahua— El número de menores infractores procesados y/o sentenciados por delitos graves se incrementó en un 135 por ciento en los últimos cuatro años, informó durante entrevista con El Diario el fiscal de Ejecución de Penas y Medidas Judiciales, Eduardo Guerrero Durán.
“Nuestra población de menores infractores creció exponencialmente, pues actualmente tenemos más del doble de menores recluidos en los Centros de Reinserción Social para Adolescentes Infractores (Cersai) que cuando llegamos”, expresó.
El fiscal explicó que cuando comenzó la actual administración estatal en octubre del año 2010, había 220 menores recluidos en los centros, “y al día de hoy (viernes) tenemos 518, entonces eso generó un problema muy serio en los centros porque no estaban preparados para albergar a tanto menor de edad”, reconoció.
“Y voy a dar un dato adicional: Nosotros tenemos más gente que el Distrito Federal en población de menores infractores, desde el año pasado se detectó esto y se hizo un planteamiento de que se iba a llevar a cabo este año toda una reingeniería para mejorar las instalaciones e incrementar la capacidad de resguardo”, señaló.
—¿A que se debió este incremento significativo en la comisión de delitos por parte de los menores?
“Es muy sencillo, lo que pasa es que los menores están siendo reclutados por los grupos del crimen organizado, por ejemplo el 90 por ciento de los muchachos que movimos hace una semana están por delitos de alto impacto, extorsión, homicidios, secuestros, robo agravado; y delitos contra la salud. No están ahí porque se robaron un dulce.
Nosotros tenemos un problema, y lo dijo el Gobernador ante los legisladores, que revisaran la Ley de Menores Infractores porque hay estados en donde se permite que a los 18 y 21 años trasladen a un joven que está compurgando una condena a un Centro de Reinserción Social para adultos, aquí no te dejan, quizá sí lo pudiéramos hacer, pero tendríamos que tener un ala exclusiva para ellos y eso haría que tuviéramos que tener el doble de personal en un Cereso, eso es prácticamente imposible.
“Y tenemos un problema mayor —abundó Guerrero Durán— aquí hay penalidades de hasta 15 años para un menor de edad, es decir, entran jovencitos de 17 años y salen de 32 años, ahorita hay chavos que están por cumplir 23 años conviviendo con chavitos de 14 años, eso no es correcto, de ahí todo el operativo que tuvimos que hacer para los traslados.”
—¿De qué edades tienen ustedes bajo resguardo a los menores recluidos?
“De 14 años hasta 22 y 23 años ahorita y ¿qué pasó?, pues se determinó cerrar el Centro de Cuauhtémoc porque no cumplía con las características necesarias en seguridad, ni en infraestructura, ni para la escuela, para alimentación y hospedaje, ni para la visita familiar y por eso decidimos cerrarlo.
“Traíamos además otro problema más grande, que las mujeres menores de edad las teníamos dentro de los mismos centros varoniles, pero en módulos separados; sin embargo, sí tenían convivencia a la hora de clases, de las visitas, de salir a algún deporte con los varones, y eso es algo muy delicado.
“¿Qué fue lo que hicimos?, que a raíz de la fuga adelantamos un mes el plan que teníamos, cerramos entonces el Centro de Cuauhtémoc y creamos tres centros, que están por publicarse en el Diario Oficial del Estado, un femenil que está aquí en Chihuahua, un ala totalmente separada con escuela, comedores, áreas de visita, deporte, de psicología y trabajo social, y ese es el centro femenil como un centro separado.
“El centro varonil que teníamos lo dejamos sólo para jovencitos de 14 a 17 años, y el de Juárez es el que dejamos para los menores que cumplieran su mayoría de edad que en este momento son 318.
“A todos los menores de Cuauhtémos los movimos para acá (la capital) y a todos los que tenían la mayoría de edad los movimos hacia Juárez.
“De Cuauhtémoc se movieron a 78 en total, de los cuales 37 llegaron aquí a Chihuahua y 41 a Juárez, puros hombres; de Juárez movimos 15 mujeres para acá, y 86 hombres menores de edad para Chihuahua. Mientras que de esta capital movimos a 100 que eran ya mayores de edad a la frontera”, detalló el titular de la FEEPyMJ.
Guerrero anunció que este año se aplicará toda una reingeniería en los centros para menores, para buscar la certificación de la Asociación de Correccionales Americana (ACA).
“Nos ha tocado tomar decisiones difíciles y atorar el toro por los cuernos. Es un proceso de reingeniería dentro de los Cersai, vamos a hacer remodelaciones con una inversión cercana a los 12 millones de pesos que se aplicarán este año”, dijo.