Orlando Chávez Echavarría
El Diario
Chihuahua— Decenas de concesionarios impidieron el paso a empleados del Gobierno del Estado que intentaron tomar posesión de las instalaciones que tiene la Coordinadora de Transporte Colectivo (CTC) en los talleres del ViveBús.
Los empleados estatales fueron encabezados por el director de Transporte, Gustavo Morales, quien según narraron los concesionarios, llegó armado, lo que fue calificado como un acto de intimidación.
Los concesionarios se organizaron para vigilar las instalaciones, ya que no están de acuerdo con entregar lo que consideran su patrimonio. Acusaron al Estado de haber bloqueado a la empresa CTC con el objetivo de quebrarla para poder quedarse con el sistema.
El intento de tomar el control de las instalaciones fue realizado a las seis de la mañana, cuando varios de los empleados estatales llegaron a las instalaciones de los talleres del ViveBús, ubicados en la Avenida Pacheco.
El grupo, encabezado por Morales, intentó entrar, pero el paso les fue bloqueado por varios concesionarios y luego de varios minutos y algunas fricciones que no llegaron a la violencia, el grupo de operadores de las rutas se incrementó.
Luego de varios minutos de diálogo, el personal de Gobierno del Estado se retiró del lugar, mientras que los concesionarios se quedaron en el acceso principal con la idea de no dejar pasar a nadie que pretendiera manejar las instalaciones.
Juan Gómez, secretario general de la empresa Coordinadora de Transporte Colectivo, comentó que no están dispuestos a entregar el sistema de transporte debido a que lo que se les prometió fue prestar un servicio integral.
Enfatizó que el Gobierno del Estado anunció que en cuestión de 90 días entregará la prestación del servicio a una paraestatal, pero que eso no solucionará los problemas que existen.
Añadió que a los concesionarios se les prometieron varias cosas que no fueron cumplidas, como una mejor tarifa y el apoyo del Estado, en lugar de eso solamente los dejaron solos para que la empresa quebrara económicamente, y tener la justificación de hacer la requisa.
“Nos están dejando la parte del sistema que tiene problemas, y se están llevando la parte bonita, cuando los problemas que hay en las rutas alimentadoras fueron provocados por el mismo Gobierno del Estado, ya que fue la Dirección de Transportes la que definió las rutas, y que cuando queríamos intervenir no nos dejaban”, dijo.
La postura de los concesionarios es la de no negociar más con el director de Transportes, debido a que generó una molestia generalizada que haya acudido armado. “No nos preocupa que traigan a policías, porque no somos delincuentes, éste es un problema de una empresa con Gobierno… no queremos que vengan funcionarios armados queriendo amenazar”, señalaron.
Gómez, quien estuvo acompañado por el director de la empresa CTC, Francisco Lozoya.
Ambos destacaron que solamente están defendiendo el patrimonio de familias. Gómez declaró que se ha señalado que hay concesionarios sin camiones, sin embargo recalcó que esto se debe a que cuando empezó la operación del ViveBús se dijo que sería 370 camiones, por lo que muchos salieron de circulación y varios vendieron sus unidades.
Finalizaron que buscarán de la manera legal revertir la requisa, ya que el documento publicado por el Gobierno del Estado es ambiguo y con fallas legales, además de que existen compromisos que no están siendo cumplidos.
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