El Diario de Chihuahua
2014-04-17
Chihuahua.- Tras el asesinato del joven seminarista Gustavo Samuel, el arzobispo de la Diócesis de Chihuahua, Constancio Miranda Weckman, dijo que no tomarán medidas de seguridad especiales para los seminaristas y destacó que debe existir conciencia tanto en la ciudadanía como en los seminaristas para evitar un acto como el ocurrido.
Agregó que si bien es un hecho que se lamenta profundamente, no se vive un momento de terror.
Lo único que pide a los seminaristas es que duerman y coman en la sede parroquial y al día siguiente se trasladen a donde tienen que ir a realizar sus misiones como seminaristas, agregó.
Destacó que no se puede estar trasladando a todos los seminaristas juntos, ya que visitan diversas regiones del Estado, por lo cual pidió conciencia ante éste y todos los hechos de violencia que han ocurrido en el Estado, a fin de cambiar de una vez por todas las condiciones negativas que se viven en la actualidad.
“Más que de la mano humana es de la inhumana, es una obra del demonio, no tengo más que agregar, más que sigamos trabajando y que la vida es cuestión de todos y no dejemos que el demonio trabaje por nosotros", expresó.
"Tenemos las armas, frecuentemos los sacramentos, vayamos a abrir la mano a nuestros hermanos, porque todos podemos juntos hacer una hermandad”, dijo.