Manuel Quezada Barrón
El Diario
Chihuahua– A los pies del Sagrado Corazón de Jesús en la capilla del Seminario de Chihuahua, fue velado ayer el cuerpo del seminarista Samuel Gustavo Gómez, quien fue privado de su libertad y asesinado con arma de fuego el martes en la comunidad de San Ignacio, municipio de Aldama, sitio a donde fue enviado a predicar el Evangelio.
Ante este hecho, se impuso un protocolo de seguridad para los 75 seminaristas que participan en las misiones de Semana Santa, en el cual se les indicó que no pernocten en las rancherías y regresen a las cabeceras municipales, informó el rector del Seminario, Luis Martín Barraza.
La misa de cuerpo presente del seminarista se llevará a cabo hoy jueves a las 10 de la mañana en el templo de la Divina Providencia, donde pertenecía el joven.
Durante todo el día se ofreció el Rosario por el descanso del seminarista y el consuelo de sus familiares.
El obispo Constancio Miranda y sacerdotes acudieron al Seminario para solidarizarse con los deudos y los mismos seminaristas, quienes desconsolados se abrazaban, lloraban y se reconfortaban entre sí.
En entrevista, el rector del Seminario, Luis Martín Barraza, dijo que Samuel Gustavo Gómez era un chico muy amable que conectaba fácilmente con sus amigos y con los que lo rodeaban. Fue un alumno carismático, bromista y dócil en lo que se refiere a la formación del sacerdote.
Informó que éste era su segundo año y cursaba su primer año de Filosofía, ya que había pasado el Introductorio.
Samuel Gustavo ya había pasado la experiencia de misionar en Semana Santa, de orar y animar a las comunidades, llevando un mensaje de paz, esperanza y amor.
Esta era la segunda ocasión de su servicio de misionero, pero al iniciar la Semana Santa encontraron esta noticia lamentable.