The New York Times
2018-04-10
Londres– Después de meses de especulación acerca de si los Obama o los Trump serían invitados a la boda real del príncipe Harry y Meghan Markle que se llevará a cabo el próximo mes, la respuesta final es que ninguno de los dos asistirá.
Para eludir cuidadosamente el tema, el Palacio Kensington dio a conocer un opaco comunicado este martes diciendo que ningún político sería invitado a la boda que se efectuará el 19 de mayo en el Castillo Windsor, ni siquiera la primer ministro Theresa May de Gran Bretaña.
“Se ha decidido que una lista oficial de líderes políticos — tanto del Reino Unido como internacionales — no serán requeridos a la boda del príncipe Harry y la Srita. Markle”, dijo el Palacio Kensington a través de un comunicado. “El gobierno de su majestad fue consultado sobre esa decisión, que fue tomada por la Familia Real”.
La falta de una “lista oficial” fue interpretada por los observadores de la realeza que no se enviarían invitaciones a los líderes políticos.
Al decidir que los asistentes se limitarían a los amigos cercanos y familiares, la pareja mantuvo las cosas con un bajo perfil, rompiendo con una larga tradición de bodas reales británicas a las que han asistido líderes y políticos mundiales.
La pregunta de invitar a los Obama o a los Trump fue siempre difícil. Se creía ampliamente que los Obama tenían una ventaja, ya que el príncipe Harry y Barack Obama forjaron una amistad cuando asistieron a los Juegos Invictos que se efectuaron el año pasado en Toronto.
Durante el evento, el príncipe Harry entrevistó al ex presidente para el emblemático programa “Today” de BBC Radio 4, siendo la primera entrevista internacional que concedió Obama después de haber concluido su mandato.
Aunque los periódicos británicos reportaron en diciembre que la pareja real se encontraba bajo una gran presión diplomática sobre invitar al presidente Trump y a la primera dama, a pesar de que Markle fue una crítica de Trump.
La primer ministro está ansiosa por mantener buenas relaciones con la Casa Blanca, ya que existe la intención de negociar un tratado comercial bilateral tan rápido como sea posible después que Gran Bretaña salga de la Unión Europea.
Una fuente del palacio, que habló de manera anónima y siguiendo el protocolo, dijo que el príncipe Harry y Markle esperaban ver pronto a los Obama, aunque confirmaron que ellos no asistirían a la boda.