Doly Mallet / Agencia Reforma
2017-02-23
Ciudad de México.- A 14 años de haber filmado ‘El Aro’ (2002) y después de desarrollar la saga de ‘Los Piratas del Caribe’, el cineasta Gore Verbinski ansiaba regresar al género de horror.
Y lo hizo con ‘La Cura Siniestra’, que es sobre un joven que tiene que ir a un spa en Suiza a recoger al dueño de la organización para la que trabaja. Al llegar, tiene un accidente de auto y debe quedarse en el misterioso lugar, que parece tener muchos secretos.
El protagonista, Dane Dehaan, cuenta en entrevista que para que su actuación estuviera acorde con lo que deseaba el director, éste le pidió que viera clásicos como ‘El Bebé de Rosemary’ (1968), ‘El Inquilino’ (1976) y ‘El Resplandor’ (1980).
“Gore me dijo que esas películas eran su inspiración”, explica. “Es algo ambicioso, pero creo que La Cura... tiene la misma vibra de esos filmes clásicos, pero también muestra lo que podemos hacer hoy en en día con nuevas tecnologías”.
En una de las primeras escenas que filmaron, la del choque automovilístico, Dane se dislocó el hombro.
“Literal, sentí cómo se me salió y se me volvió a meter. Cuando terminamos de rodar, le dije a Gore: ‘Vas a tener que usar esa toma te guste o no, porque no pienso repetirla”.
“Dane se portó como un guerrero, pero es joven y aguanta mucho”, agrega Verbinski. “Necesitas a un actor así para una película como ésta. Lo que queríamos era tomar algo aparentemente bonito y volverlo tenebroso. Quise hacer con un spa, lo que hizo Spielberg con la playa en ‘Tiburón’ (1975)”.
Admirador del cine de Roman Polanski, Verbinski busca crear todo tipo de sensaciones en la audiencia con este filme rodado en Alemania.
“Es muy divertido, porque estás cocinando lentamente al público. Tienes a 500 personas encerradas en un cuarto oscuro, es un experimento con sonidos e imágenes. Además, se presta para jugar con fotografía súper estilizada y con una narrativa surrealista”.
Pero si el filme fue una suerte de tortura para alguien fue para su actor principal, quien destaca que por semanas tuvo muchas pesadillas debido al filme en el que lo acompaña, entre otros, el británico Jason Issacs.