¿Maravillosa?

Agencias

Nueva York.- La Mujer Maravilla es desde el pasado viernes Embajadora de la ONU para el Empoderamiento de las Mujeres y Niñas, pero el nombramiento dividió a la organización, pues hubo protestas.
Para las Naciones Unidas, el personaje es un símbolo ideal para hacer llegar a nuevas audiencias sus mensajes en favor de la igualdad, pero por otro lado, numerosas personas dentro y fuera de la organización opinaron lo contrario y se movilizaron en contra de la nueva embajadora.
“La Mujer Maravilla es un ícono. Desde su nacimiento hace 75 años ha sido conocida por su compromiso con la paz, la justicia y la igualdad”, defendió la española Cristina Gallach, secretaria general adjunta de Comunicaciones de la ONU.
Mientras Gal Gadot, quien encarna a la heroína en cine, hablaba, unas decenas de funcionarios y diplomáticos, en su mayor parte mujeres, protestaron desde el público dándole la espalda, alzando el puño y otros con pancartas que decían: “No soy una botarga”.
La embajadora de Nicaragua ante la ONU, María Rubiales, explicó que las mujeres de su país no se sienten representadas por ese personaje.
“Quisimos venir hoy aquí a demostrar que realmente nosotras no estamos a favor de esto”, señaló Rubiales.
El rechazo al reconocimiento se debe a la poca respuesta que tuvieron sus peticiones a la instancia internacional para que una mujer fuera nombrada secretaria general, antes del reciente nombramiento del portugués Antóno Guterres como nuevo titular.
El nombramiento se le otorgó a Lynda Carter, quien interpretó al personaje en la famosa serie de televisión que fue transmitida de 1975 a 1979.
Carter defiende las cualidades de su personaje y asegura que la clave de la Mujer Maravilla ha sido enseñar a las mujeres lo que pueden conseguir, algo que, dice, corroboró con miles de cartas que recibió durante varios años.