Espectaculos

‘Toy Story’; una fábrica de sueños

Agencia Reforma

2015-05-23

Los Angeles– Cuando los empleados de Pixar cumplen una década en la empresa, no reciben un reloj de oro ni una medalla: reciben una estatua de Buzz Lightyear. Y cuando cumplen dos décadas contratados, es una estatua de Woody, el vaquero.
Los protagonistas de Toy Story, estrenada hace ya 20 años como el primer largometraje animado digitalmente, son el símbolo de la empresa. Desde el estreno de Toy Story, Pixar no sólo ha corrido la barrera de lo que se puede hacer con tecnología en la gran pantalla, sino en la complejidad de historias que se pueden contar en dibujos y colores, con personajes como Nemo, Rayo McQueen, los monstruos Sully y Mike, el ratón cocinero Remy o un robot llamado Wall-e, entre otros. El estudio de animación hoy suma 40 nominaciones al Oscar y más de 6 mil mdd en ganancias alrededor del mundo.
Pero, hace 25 años, los jóvenes animadores que trabajaban en la compañía no pensaban que iban a convertirse en esta revolución animada del séptimo arte. “Yo quería trabajar en animación de dibujos, y  tomé este trabajo en una compañía que hacía computadores y cortometrajes”, recuerda Pete Docter, quien comenzó como animador en 1992, y ganó el Oscar a mejor película animada por ‘Up’ como director.

Donde todo empezó
Los inicios de Pixar parten en 1979, cuando Ed Catmull es reclutado por Lucasfilms, de George Lucas, para dirigir el área de computación, pensando en desarrollar tecnología para el cine. En 1983 se suma John Lasseter, quien hasta entonces era el único animador entrenado tradicionalmente. Al año siguiente, la compañía es comprada por Steve Jobs, y comienzan a trabajar en cortometrajes hechos con computadoras, con la ambición de mostrar su tecnología; en 1986 nace oficialmente Pixar. En 1991 se suma Disney, para hacer y distribuir largometrajes animados en conjunto. Así comienza el trabajo en una historia sobre juguetes que cobran vida.
No fue un camino fácil. Los animadores de Pixar, Lasseter, Docter, Andrew Stanton y más, trataban de armar la historia de Woody y Buzz, un juguete viejo y uno nuevo que se pelean por el amor de un niño, al mismo tiempo que recibían correcciones de Disney.
Se les  hizo difícil armar una historia de 75 minutos, y el personaje de Woody resultaba cada vez más odioso, tratando de cumplir con el jefe de Disney, Jeffrey Katzenberg, quien insistía en que quería una película más incisiva.
Al año de trabajo, los equipos de Pixar y Disney vieron la primera y desastrosa versión de la historia.Lasseter pidió tiempo para mostrar otro avance. Y ahí  Lasseter, Docter y más se encerraron a contar la historia que querían, como ellos querían.

X