Espectaculos

De Chihuahua a Cannes

Patricia Mayorga
El Diario

2015-04-07

Chihuahua— Los cineastas cuauhtemenses Isis Kiwen (directora) y Jairo Sifuentes (productor) viajaron a Francia luego de que su cortometraje ‘El Árbol de los Números’ (The Tree of Numbers) resultó preseleccionado en el apartado Short Film Corner del Festival de Cannes y esta semana conocerán si pasan a la siguiente etapa.
Con un reparto de habitantes de Cusihuiriachi y un escenario natural, Kiwen logró en un lapso de 15 minutos, entrelazar técnicas de segunda y tercera dimensión para retratar el mundo onírico de la niña protagonista, Vera (Jocelyn Olague).
Vera vive con su padre (Miguel Serna) en el pueblo minero y asiste a la única primaria de la localidad. El anhelo de la niña por buscar a su madre la lleva a dar vuelo a su imaginación y recrear esa búsqueda a través de sus dibujos, que la distraen de sus clases.
El profesor (David Pérez) la reprende de manera constante por la falta de atención, en una ocasión la castiga poniéndole orejas de burro, lo que le desata la burla de sus compañeros de clase. La niña sale corriendo del salón y monta un asno en busca de su madre.
Las imágenes animadas de Manuel Alderete y la edición de Ángel Chacón abren el cortometraje, que llevan al espectador al rico mundo de la imaginación. Con la música de Héctor González Sifuentes, transportan hacia la escuela real que Vera previamente había dibujado.
La fotografía de Héctor Lozoya capta las imágenes reales del pueblo, que se fusionan con los dibujos de la protagonista plasmados en su libreta. Luego, da vida al viaje de Ada y Ramón, dos niños imaginarios que durante una noche son perseguidos y atrapados por una bruja a quien atacan y vencen.
La fusión que Isis Kiwen realiza de la ficción con la realidad, son calificadas por el productor Jairo Sifuentes como un reto intelectual, ya que la animación digital da paso a la fotografía de Lozoya y viceversa, que se enriquece con el audio de Carlos Rojas, del estudio Rot Producciones.
En aquel ambiente onírico de Vera, la niña logra ‘encontrar’ a su madre en un árbol grabado de números, a donde llega luego de montar el jumento. El padre de la niña organiza a un grupo de hombres para buscarla y luego de varias horas, la encuentra al lado del árbol, donde observan los números plasmados.

3 años; 50 personas y 120 mil pesos

El cortometraje ‘El Árbol de los Números’ fue realizado en tres años aproximadamente con el apoyo de alrededor de 50 personas y un presupuesto de 120 mil pesos, elementos con los que han logrado ser seleccionados en otros festivales fílmicos, entre ellos el de Cine de Madrid y la Bienal Mikonos de Grecia. Ahora, los realizadores se encuentran en Francia en espera de conocer si entran a la étapa de competencia del 68 Short Film Corner del Festival de Cannes, que se realizará del 13 al 24 de mayo próximo.
Kiwen expresa que el hecho de que el cortometraje haya sido preseleccionado es un orgullo y un logro para la empresa SecuenciaFi, que conforma al lado de sus compañeros y cuyo objetivo es, contar historias chihuahuenses.
“Cada integrante del equipo estudió algo relacionado al cine sin saber que haríamos cine, es decir que todos coincidimos en que contar una historia era la base de nuestra carrera, lo que nos llevó a esto. Nos juntamos pensando en realizar este cortometraje sin apoyo, sin una industria, pero poco a poco reclutamos gente que pudiera realizar un trabajo específico en la producción”, agregó Kiwen en entrevista para El Diario.
Cuando Isis Kiwen y Jairo Sifuentes iniciaron la creación del cortometraje ‘El Árbol de los Números’, consiguieron el apoyo del Instituto Chihuahuense de la Cultura (Ichicult) y posteriormente de la Universidad Autónoma de Chihuahua (UACH), pero no hubo confianza en que se tratara de una historia exitosa.
Posteriormente iniciaron su pequeña industria, hasta que lograron reunir a dos familias detrás de la producción en diferentes áreas: Sifuentes y Olague, a las que se unieron Manuel Alderete, animador egresado de talleres impartidos por Pixar y Disney, y Carlos Rojas Hagelsieb.

Cada vez más confiados

“Hoy hay confianza en nosotros, ya que tenemos nuestros productos, como ‘El Árbol de los Números’, que ha sido seleccionado en diferentes festivales. El logro y mérito, por lo tanto, es inmenso, porque con el poco presupuesto que tenemos, nuestro cine, que cuenta historias de la gente y del estado de Chihuahua, llama la atención”, dice la cineasta Isis Kiwen respecto a su productora, SecuenciaFi.
La directora cinematográfica indica que estarán en Cannes orgullosos porque representan a las 50 personas que participaron, pero también al estado de Chihuahua y principalmente al pueblo de Cusihuiriachi, que tuvo su época de bonanza y que hoy se encuentra descuidado y con pocos habitantes, quienes luchan por mantenerlo en pie.
Recuerda que ella llegó del set cinematográfico más antiguo del mundo en Alemania (donde estudió), en los Estudios Babelserg, a la Ciudad de México y posteriormente descubrió Cusihuiriachi. “En los Estudios Babelserg se hace cine como una maquila. Y en la Ciudad de México llegué a la productora más famosa de dos actores, donde la gente compite hasta por el aire que respira. De pronto me encontraba en Cusihuiriachi, Chihuahua, haciendo un corto con un pueblo que salió a recibirnos, a apoyarnos, y que al final nos rogaban que nos quedáramos. Eso cambió nuestras vidas y por eso nos agrada tener a nuestro estado como set cinematográfico. Conocemos más de él y su gente, y eso nos mantiene enfocados en nuestro objetivo: contar historias, las historias de Chihuahua”, dice.
SecuenciaFi surgió hace cuatro años, a donde llegaron luego de ir ‘picando piedra’ cada uno desde su talento y vocación, pero una vez unidos, han florecido, cuenta Isis Kiwen, ya que han estado en Colombia; en Chicago como antesala a los Premios Oscar; en varias exhibiciones en México con un producto llamado 'Eleuterio El Héroe' (también tarahumara), que pronto viajará a Corea al foro mundial de agua junto a la Conagua.
En Cusihuiriachi, el pueblo está contento y ansioso de conocer el resultado, luego de que los habitantes les pedían que no se fueran al concluir la filmación.

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