Espectaculos

Prueban el sabor fronterizo

Fernando Aguilar / El Diario

2015-01-24

Después de la noche del viernes, nadie puede contarles al español, a los dos mexicanos y a la londinense a qué sabe esta frontera, porque lo supieron desde que pidieron burritos y observaron el auditorio lleno, antes de ofrecer aquí el primero de sus conciertos del año.
Se llaman Jenny and The Mexicats y los cuatro se presentaron ante los juarenses como una fusión de ritmos flamencos con folk y rockabilly que, gracias a su diversidad cultural, pudo ofrecer desde una cumbia hasta un reggae.
Su presentación cerró el Festival Cultural Alternativo (Culfest) quince minutos después de las 10:00 de la noche, cuando la cantante paseña Nadine ya había terminado su repertorio de baladas y jazz.
A esa hora, la única luz que iluminaba el auditorio era la que se reflejaba en la trompeta de Jenny Ball, la vocalista que a lo largo de una hora y media interpretó 15 canciones y desató los piropos de algunos, no por su atuendo traslúcido, sino por su aire internacional: el clásico acento españolado con el que media hora antes había dicho que todos en la banda eran sus ‘compas’.
Igual que ‘I Will Go’, muchos de los temas que los chicos de Jenny and The Mexicats tocaron pertenecen a ‘OME’ –su álbum más reciente que en náhuatl significa ‘dos’–, aunque otros como ‘Me Voy a Ir’, ‘Heaven Knows’ y ‘Starting Something’ son del primero.
Algunos tienen un significado especial para los muchachos, como el que se llama ‘No Dejes de Quererme’, cuya versión de estudio grabaron con La Sonora Santanera y cuando la interpretaron en vivo elevó los ánimos de la gente hasta el punto en que las palmas, más que el cajón español, marcaban el compás.
Varias de esas canciones han sido escritas por la vocalista londinense, pero el guitarrista ‘Pantera’ también ha compuesto algunas, como ‘Llueve en el Mar’, que en el concierto agradó a los asistentes por su mezcla introductoria de guitarra y percusiones.
Dos músicos acompañaron a los madrileños en el teclado y en las percusiones con las cuales iniciaron el reggae de Jenny ‘Me And My Man’ y una canción “muy, muy vieja” que se llama ‘I Will Go’.
La noche transcurrió tranquilamente y en la medida opuesta lo hicieron las peticiones de los admiradores de la cantante: una voz masculina áspera y desgastada rompía el silencio que separaba a una canción de otra para pedirle a su intérprete un beso.
‘Head In My Heart’, ‘Sasha y Esteban’ y ‘Labios’ también están incluidos en ‘OME’ y sonaron en vivo. La última canción es otra de las favoritas de Jenny porque apareció en la película de ‘Amor de Mis Amores’ y, anoche, apenas iniciaban las notas de su trompeta, los aplausos la acompañaron. 
“Tengo que decirles algo:”, anunció uno de los músicos al terminar esa pieza.
“Hay algo peligroso cuando el David (percusionista) se destapa: va a haber un ‘fiestón’; hay que tener cuidado de no despertar a la bestia”.
Pero la ‘bestia’ despertó e impuso  su ley con  ‘Frenético Ritmo’, siguió con ‘Duele al Caminar’ y 'Boulevard'.
Luego de escucharse ‘Flor’ y ‘Back To Basics’, el auditorio quedó en completa obscuridad a las 11:40 y Jenny Ball dijo: “Tengo una última pregunta para ustedes: ¿a quién no le gusta trabajar? Y todos respondieron al unísono cantando ‘Verde Más Allá’, la última canción de la noche.

X